MADRID 18 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Fundación SEPA y de la Sociedad Española de Periodoncia, Antonio Bujaldón, ha destacado la importancia del cuidado bucodental durante la pandemia por el coronavirus, recordando en las consultas dentales "no será infrecuente" atender a personas que han padecido el virus en cualquiera de sus fases de gravedad.
Atendiendo a esta realidad, el experto ha destacado la función esencial que puede y debe jugar la consulta dental en el ámbito de la prevención de ciertas enfermedades (no solo de la cavidad oral), sus complicaciones asociadas y la promoción de la salud.
"La estrecha vinculación entre salud periodontal y salud general, así como la importancia que adquiere contar con un buen estado de salud global para afrontar con mayores garantías la posible infección por SARS-CoV-2, pone en valor el cuidado bucodental en estos momentos", ha destacado.
Y es que, según SEPA, un problema importante y no resuelto es el futuro incierto que aguarda a los pacientes que han conseguido vencer al coronavirus. En este contexto, el coordinador de los Grupos de Trabajo de SEPA, Miguel Carasol, ha señalado que los equipos dentales pueden contribuir al cuidado bucodental de los pacientes, manteniendo unas bocas sanas que permitan prevenir complicaciones que se pueden pagar caras en la fase post Covid-19.
Y es que, a nivel periodontal, está ampliamente demostrado el papel de la periodontitis como factor de riesgo para la patología cardiovascular aterosclerótica (expresada clínicamente como isquemia coronaria, ictus o patología vascular periférica), para la diabetes mellitus y para determinados cuadros de neumonía.
"Todas estas enfermedades figuran entre las complicaciones que se pueden desarrollar tras la infección por el coronavirus. Por tanto, ahora más que nunca, es fundamental incorporar a las consultas sencillos procedimientos y protocolos necesarios para detectar de forma precoz el riesgo cardiovascular (incluida la hipertensión arterial), así como de prediabetes o diabetes, y establecer las medidas oportunas para prevenir y tratar la patología periodontal en sus formas más tempranas", ha indicado Carasol.
El fin último, apostilla, es disminuir el riesgo global de patología sistémica, especialmente en los pacientes de edad más avanzada, con enfermedades crónicas previas o que hayan padecido la infección por coronavirus, con sus posibles secuelas.
SECUELAS DEL CORONAVIRUS EN LA SALUD BUCODENTAL Y GENERAL
Las consecuencias de la infección por el nuevo coronavirus perduran tras el alta hospitalaria del paciente, especialmente en los casos más graves, y el riesgo de padecer patología importante con el tiempo se eleva de manera considerable.
Por ejemplo, los pacientes que han sufrido neumonías, sobre todo en su forma más severa y asociada a procesos de inflamación grave pueden tener más riesgo de padecer enfermedades futuras*como*patología isquémica coronaria, ictus y cuadros de insuficiencia renal.
"Ya en 2015, analizando epidemias previas por coronavirus, se concluyó que el riesgo de padecer enfermedades cardiacas era cuatro veces mayor en las personas que habían padecido neumonía", ha enfatizado el doctor Carasol.
La situación resulta especialmente controvertida en el grupo de pacientes de más edad y que, además, suelen presentar una o más de las condiciones crónicas más frecuentes en el ser humano de los países de nuestro entorno. En este sentido, el experto ha señalado que tienen un riesgo más elevado y comprobado de ser infectado por el coronavirus en su forma más grave, así como presentan una tasa mayor de mortalidad.
Así, por ejemplo, las series preliminares con los datos de los pacientes en China mostraron que la mortalidad estaba claramente asociada a la edad, con una mayor tasa en mayores de 85 años (10-27%), seguidas de pacientes entre 65-84, de pacientes entre 55 y 64 años y personas de 20-54 años.
Otros problemas no despreciables que pueden presentar los enfermos de coronavirus, especialmente los ingresados en cuidados intensivos, son la atrofia muscular y debilidad tras pasar por periodos prolongados de conexión a respiradores. Otra de las repercusiones que puede causar la hospitalización es el delirio o síndrome confusional agudo, que puede conducir a alteraciones cognitivas a largo plazo, tales como problemas de memoria.
Estudios previos demuestran que un tercio de las personas hospitalizadas por SARS habían desarrollado síntomas moderados o severos de depresión un año después de superar la enfermedad. Finalmente, y en el ámbito concreto de la Odontología, desde SEPA se ha recalcado la existencia de una asociación positiva entre la periodontitis y la neumonía nosocomial en los pacientes ingresados en cuidados intensivos, "lo que podría complicar aún más el pronóstico de los pacientes con coronavirus derivados a estas unidades.