Una experta aboga por "la alta sospecha diagnóstica" para no retrasar diagnóstico y evitar transmisión de tuberculosis

Actualizado: miércoles, 24 marzo 2010 15:33

La incidencia de la enfermedad en Galicia se redujo de 72,3 casos por 100.000 habitantes en 1996 a 30,7 en 2009

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

La facultativa especialista en Medicina Preventiva y responsable de la Unidad de Tuberculosis del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), Victoria Túñez Bastida, apostó hoy por mantener "la alta sospecha diagnóstica" con el objetivo de no retrasar los diagnósticos y frenar la transmisión de la tuberculosis.

En declaraciones a Europa Press, coincidiendo con el Día Mundial de la Tuberculosis, Túñez incidió en que, a pesar de la reducción de la incidencia en Galicia, el Programa gallego de prevención y control de la tuberculosis "incide más en los infectados" que no han enfermado aún para evitar que lo que hagan.

"Se debe de mantener la sospecha diagnóstica porque sino malamente se puede diagnosticar", sostuvo y comentó que mantendrán en este sentido un "mensaje constante" a los profesionales de Atención Primaria, puerta de entrada del sistema, con cursos formativos y charlas para que trabajen en esta línea.

También esta especialista resaltó la importancia de cumplir el tratamiento frente a la tuberculosis, recordando que duran unos seis meses y suponen la ingesta de un elevado número de pastillas. De este modo, comentó que en algunos casos cuando ven que mejoran al mes y los pacientes se encuentran bien dejan de tomarlo. Si bien reconoció que el abandono presenta un "porcentaje mínimo" --por debajo del 1%--, incidió en la importancia de completarlo.

Por ello, comentó que el programa gallego incluye un tratamiento observado en algunos casos "ante las sospechas de incumplimiento", por el que personal formado vigila la ingesta de los fármacos y realiza un seguimiento al paciente.

Así, desde 1998 las unidades de tuberculosis cuentan con equipos para ello. "El abandono es muy bajo", matizó y concretó que en 2007 lo dejaron ocho personas en Galicia.

INCIDENCIA

La Consellería de Sanidade, por su parte, resaltó que desde la puesta en marcha del programa gallego de prevención, la incidencia de la tuberculosis en Galicia disminuyó de 72,3 casos por 100.000 habitantes en 1996 a 30,7 en 2009.

Además, el número de enfermos anuales por esta patología se redujo un 57 por ciento en 13 años, al pasar de 2.030 a 858 casos el año pasado, presentando una disminución anual de un 6,5 por ciento.

Estos datos, según resaltó Sanidade, "acreditan la positiva evolución y el importante esfuerzo" hecho en el control de la enfermedad en Galicia, aunque en la comunidad siguen siendo superiores a las de la Unión Europea.

Victoria Túñez señaló a Europa Press, asimismo, que "sólo entre el 5 y 10 por ciento" de los contagiados enferman y resaltó el elevado porcentaje de curación, que Sanidade situó en un 90 por ciento de los casos. En concreto, la especialista apuntó que entre siete y ocho personas mueren en Galicia al año por esta patología, pero puntualizó que "en el siglo XXI nadie debería morirse de tuberculosis".

La Administración sanitaria atribuyó los "buenos resultados" del programa gallego de control y prevención a "una buena estructura con un sistema epidemiológico de vigilancia específico" para la tuberculosis que cuenta con un circuito de búsqueda activa "muy eficaz" en la captación de casos no declarados --pudiendo suponer un 30%--, y al "trabajo y esfuerzo de coordinación de los profesionales de la sanidad gallega", en especial de los equipos de las siete unidades de tuberculosis (UTB) de la comunidad.

Todo ello, según Sanidade, hace que el programa en esta materia de Galicia, "sea hoy una referencia a seguir en otras comunidades", como así lo puso de manifiesto ayer en la mesa redonda organizada por el Congreso de los Diputados el coordinador de la Unidad de Investigación en Tuberculosis de Barcelona.

Con todo, Sanidade aboga por "seguir trabajando hasta alcanzar una situación epidemiológica de la tuberculosis en Galicia similar a los países europeos del entorno" --la media de España es de 18,1 casos por cada 100.000 habitantes--, por lo que aconseja "ajustar" las medidas de control al "declive de la incidencia de la enfermedad", por lo que apuesta por "preservar el esfuerzo para alcanzar metas más ambiciosas".

En este sentido, manifestó que el abordaje de estos nuevos retos "exige disponer de herramientas adecuadas y bien diseñadas" con el fin de mejorar "la calidad y rapidez" en el manejo de la información y la implicación de los profesionales sanitarios, agentes sociales y administración sanitaria "para consolidar los progresos realizados en el control de la TB, persistir en ellos y mejorarlo en lo posible".