MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Cardiología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha publicado en el 'Journal of the American College of Cardiology' el primer estudio que muestra la eficacia real del uso de las células madre de segunda generación para tratar los infartos.
El trabajo, denominado 'TECAM-2', se ha presentado en el XIII Simposio de Terapia Celular e Innovaciones Cardiovasculares que organiza el centro y que reúne a los mayores expertos internacionales, convirtiéndose en el más importante del mundo en esta materia.
En esta investigación se utilizó tanto la inyección directa de células mononucleares de la médula ósea en la arteria coronaria responsable del infarto agudo de miocardio, como su salida a la circulación periférica desde la médula ósea con inyecciones subcutáneas de factor estimulador de colonias de granulocitos para que viajen hasta el corazón y aniden en el tejido cardíaco lesionado, así como una combinación de ambos tratamientos.
Así, para valorar la eficacia de los tres tratamientos se midió con resonancia magnética la función de bomba o fuerza del corazón mediante la llamada fracción de eyección y las dimensiones del ventrículo izquierdo mediante el llamado volumen telesistólico al año del tratamiento.
Ahora bien, aunque el resultado fue que ninguno de los tres grupos demostró una mejoría de ambos parámetros en comparación con el tratamiento estándar, en el estudio sí se ha demostrado que estas estrategias reducen un 5 por ciento el tamaño de la cicatriz que perdurará durante el resto de la vida del paciente en su corazón, y eso tiene implicaciones pronosticas favorables.
Asimismo, se ha confirmado que son necesarios estudios con otros tipos celulares más potentes, las llamadas 'células madre de segunda generación' (modificadas genéticamente o mediante una serie de factores), y con mayor número de pacientes, para demostrar diferencias clínicas reales en los pacientes con infarto agudo de miocardio, ya que los tratamientos habituales ya ofrecen unos resultados de supervivencia y calidad de vida muy buenos.
Para poder realizar este tipo de estudios será necesaria la colaboración de todos los grupos investigadores a nivel mundial, como la iniciativa TACTIS, coordinada por el jefe de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, Francisco Fernández-Avilés, que cuenta con el auspicio de la Sociedad Europea de Cardiología y que se constituye una alianza de los "mejores grupos del mundo" en regeneración cardiovascular con el objetivo de planificar la investigación en este campo de la medicina durante la próxima década.