Revisa todos los metaanálisis públicos sobre cambio climático y salud mental
BARCELONA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un trabajo liderado por investigadores del Hospital Clínic Barcelona-Idibaps, que ha analizado los metaanálisis realizados a nivel mundial sobre los efectos del cambio climático y la contaminación sobre la salud mental, ha encontrado una asociación entre el aumento de temperatura y el incremento de mortalidad por suicidio o trastornos mentales.
El estudio, publicado en la revista 'World Psychiatry', también ha relacionado la exposición a varios contaminantes con una mayor incidencia de demencia o deterioro cognitivo, ha informado el Clínic en un comunicado.
Para el estudio se han revisado todos los metaanálisis publicados hasta el momento en los que se relacionaba cambio climático o contaminación atmosférica con salud mental para agrupar todos los resultados obtenidos en un gran metaanálisis ('umbrella review') para extraer conclusiones.
El metaanálisis lo han liderado el grupo Imagen de los trastornos relacionados con el estado de ánimo y la ansiedad, dirigido por Joaquim Raduà, y el de Trastornos bipolares y depresivos, encabezado por Eduard Vieta, ambos también miemrbos de la Universitat de Barcelona y del área de Salud Mental del Ciber (Cibersam).
Uno de los resultados es la asociación que se ha encontrado entre el aumento de la temperatura y los incrementos de suicidios, estimando que el calentamiento global "puede haber hecho aumentar un 5% de casos de suicidios y se prevé que este aumento llegue al 7% de cara a 2050", y un incremento de comportamientos suicidas e ingreso en hospitales debido a esta problemática.
"Estos datos sobre el impacto del cambio climático en la salud mental se añaden a los datos que ya conocíamos sobre el impacto en la salud física, obligándonos en mayúsculas a impulsar urgentemente iniciativas globales para luchar contra el cambio climático", ha señalado Raduà.
EXPOSICIÓN A DISOLVENTES
Raduà y su equipo también han encontrado que la exposición a largo plazo a disolventes está relacionada con una mayor incidencia de casos de demencia o deterioro cognitivo: la exposición a niveles elevados de productos como el tolueno --usado en pinturas-- aumenta la probabilidad de desarrollar uno de estos trastornos.
"El uso de estos disolventes plantea riesgos graves para la salud, especialmente en países de renta baja o media, donde las alternativas a estos materiales tan económicos son difíciles de encontrar para la construcción o fabricación", ha remarcado el investigador del Idibaps Michele De Prisco.
En este estudio también se indica que exponerse durante el segundo trimestre del embarazo a partículas contaminantes procedentes de combustibles fósiles y actividades industriales puede incrementar la incidencia de depresión posparto.
