MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Centro Oncológico de Mayo Clinic y del Centro Médico Case Western (Estados Unidos) está investigando las razones de la disminución de las tasas de remisión de los pacientes con linfoma no Hodgkin tratados con terapia de células T con receptores de antígenos quiméricos (terapia celular CAR-T).
"La terapia celular CAR-T es un tratamiento prometedor para el linfoma no hodgkiniano, especialmente para los pacientes que han recaído o los que no han respondido a terapias anteriores", afirma el doctor Tae Hyun Hwang, uno de los responsables de la investigación, que se ha publicado en la revista científica 'Cancer Discovery'.
Sin embargo, los datos recientes de seguimiento a largo plazo sugieren que la tasa de éxito de la terapia con células CAR-T para pacientes con linfoma no Hodgkin puede estar disminuyendo. "La remisión duradera en este entorno oscila entre el 30 y el 40 por ciento, por lo que es fundamental identificar un biomarcador predictivo para medir la resistencia de las células CAR-T, de modo que podamos asignar mejor a los pacientes una terapia eficaz", dice Hwang.
Este equipo de investigación planteó la hipótesis de que habría patrones moleculares distintos en las células CAR-T entre los pacientes que respondían al tratamiento y los que no lo hacían. Para ello, utilizaron enfoques computacionales y experimentales innovadores para identificar estos patrones.
Los investigadores generaron datos de secuenciación unicelular de ARN y proteínas de las células CAR-T antes de administrarlas a los pacientes y, de nuevo, en múltiples momentos después de ser infundidas en los pacientes. Este trabajo generó más de 133.000 perfiles de expresión unicelular que los investigadores utilizaron para desarrollar y aplicar enfoques computacionales para diseccionar patrones de expresión de ARN o proteínas a nivel unicelular de las células CAR-T asociados con la respuesta al tratamiento.
Utilizando estos enfoques computacionales, el equipo descubrió que un gen llamado TIGIT se expresaba en gran medida en las células CAR-T posteriores a la infusión de pacientes que no respondían a la terapia celular CAR-T. El equipo también validó que TIGIT impulsa el agotamiento y la disfunción de las células CAR-T, y descubrió que el bloqueo de TIGIT con la terapia de células CAR-T podría mejorar la eficacia del tratamiento en un estudio in vivo.
"Si nuestros hallazgos pueden validarse en ensayos clínicos prospectivos, nuestra estrategia de bloqueo de TIGIT con la terapia de células CAR-T podría mejorar las respuestas actuales de la terapia de células CAR-T en pacientes con linfoma no Hodgkin y también podría mejorar la supervivencia de los pacientes", remacha Hwang.