MADRID 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
El tratamiento con diálisis peritoneal en pacientes con insuficiencia cardiaca congestiva que no pueden recibir un trasplante mejora la calidad de vida, la supervivencia y disminuye los ingresos hospitalarios, según los resultados de una investigación realizada por científicos de la Red de Investigación Renal (REDinREN), perteneciente al Instituto de Salud Carlos III.
La investigación, publicada en la revista 'Nephrology, Dialysis & Transplantation', incluyó a pacientes con insuficiencia cardiaca resistente a los diuréticos, con clase funcional III/IV de la New York Heart Association (dificultad respiratoria incluso en reposo), no candidatos a trasplante renal y con tratamiento médico optimizado.
Tras aplicarles diálisis peritoneal ajustada al grado de insuficiencia renal de cada uno, todos los pacientes presentaron una importante mejoría de sus síntomas con una reducción de su clase funcional NYHA (el 70% de los pacientes mejoraron 2 grados y el 30% restante 1 grado).
También disminuyó de manera importante la tasa de ingresos hospitalarios que pasó de 62 a 11 días de ingreso hospitalario por año en riesgo. Igualmente, se produjo una reducción destacada en la mortalidad (supervivencia del 82% al año y del 56% a los 2 años).
En esta misma línea, los investigadores de la REDinREN quisieron medir la calidad de vida de estos pacientes utilizaron como herramientas los cuestionarios EuroQuol 5D y SF36, alcanzando a los seis meses de tratamiento, unos resultados similares a los de la población general, tanto en la esfera física como en la mental, asegura el estudio.
Respecto al coste económico de la terapia, la investigación comprobó que los gastos (expresados en euros) son "similares" en ambas opciones de tratamiento, pero que si se ajustan estos gastos a los años de vida ganados por el paciente por la calidad de vida, la conclusión es que el empleo de la diálisis peritoneal "es realmente coste-eficiente".
El tratamiento aplicado tiene además la ventaja de presentar "escasas" complicaciones. La tasa de infecciones peritoneales en este grupo de pacientes con insuficiencia cardiaca fue de sólo 0,02 episodios por paciente y año en riesgo, frente a los 0,56 episodios que presentan los pacientes con enfermedad renal crónica.