El ISGlobal desarrolla una técnica mínimamente invasiva para obtener biopsias
BARCELONA, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 82% de las muertes infantiles en países de renta baja podrían evitarse, según un estudio de la red internacional Champs, que usó la técnica de autopsia mínimamente invasiva desarrollada por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), detectó un agente infeccioso en el 87% de los casos y señala la desnutrición como la causa subyacente más frecuente.
"Si queremos prevenir estas muertes, necesitamos conocer las causas, pero el problema es que carecemos de datos fiables", ha señalado el investigador de ISGlobal --centro impulsado por la Fundación La Caixa-- Quique Bassat, ha informado el instituto este miércoles en un comunicado.
El 99% de las muertes en menores de 5 años ocurren en países de renta baja y media, y los datos clínicos y los testimonios de la familia o cuidador --autopsia verbal--, métodos muy usados en zonas de pocos recursos, no son lo suficientemente detallados.
Bassat ha señalado que es necesario distinguir entre causas subyacentes, que inician la cadena de eventos que conduce a la muerte, y la causa inmediata de la muerte, porque el fallecimiento "puede ser el resultado de la interacción entre distintas afecciones".
El ISGlobal ha desarrollado una técnica mínimamente invasiva para obtener biopsias de diferentes órganos y poder determinar las causas de muerte mediante análisis histopatológicos y microbiológicos, que fue adaptada por la red Champs.
En el estudio, publicado por 'Jama Network Open', un equipo de Champs liderado por Bassat investigó las causas de muerte infantil en Mozambique, Sierra Leona, Kenia, Mali, Etiopía, Sudáfrica y Bangladesh.
El análisis incluyó 636 muertes en niños de entre un mes y 5 años de edad, ocurridas en la comunidad o en el hospital entre 2016 y 2020, y en todos se había hecho una autopsia mínimamente invasiva además de contar con datos clínicos y autopsia verbal.
DESNUTRICIÓN, PRINCIPAL CAUSA SUBYACENTE
Las principales causas subyacentes de muerte fueron la desnutrición (16,5%), infecciones por VIH (11,9%), malaria (11,2%), defectos congénitos (10,1%), infecciones respiratorias (8,4%) y diarreas (7,2%).
En el 87% de los casos se detectó un agente infeccioso, siendo el más frecuente 'klesibella pneumoniae' --asociada a infecciones hospitalarias--, seguido del parásito de la malaria y la bacteria causante de neumonías.
Bassat ha afirmado que el 25% de muertes se debía a una única causa, mientras que el resto se debían a "una compleja interacción de factores", por lo que ve necesario condicionar toda la cadena de eventos que conducen a la muerte.
El estudio ha concluido que el 82% de las muertes analizadas se podrían haber evitado, lo que abre "muchas oportunidades para diseñar intervenciones específicas con alto impacto".