SANTANDER, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
Manuel Cobo, cardiólogo de la unidad de cuidados intensivos del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, afirmó hoy que la terapéutica médica de la insuficiencia cardiaca ha sufrido una gran evolución en los últimos veinte años con el desarrollo de múltiples estrategias farmacológicas "que han permitido disminuir la mortalidad del síndrome de insuficiencia cardiaca casi en un 15% en los últimos 20 años".
Cobo se pronunció así durante su participación en el Curso de Verano de la Universidad de Cantabria (UC) 'Insuficiencia cardiaca: epidemia del siglo XXI', que se celebra este semana en Laredo.
No obstante, y pesar de estos avances, Cobo aseguró que la mortalidad de la insuficiencia cardiaca sigue siendo alta, pues "es una enfermedad grave cuya mortalidad oscila en torno a un 15-20% en el primer año después del diagnóstico, por lo que todavía queda mucho camino por recorrer".
Los tratamientos fundamentales que se han desarrollado en los últimos años son los metabloqueantes que van dirigidos a aumentar la supervivencia de los pacientes. Hay un segundo grupo de fármacos, diuréticos, que alivian la sintomatología, y otros tratamientos "más experimentales y que aún están en fase de desarrollo", explicó.
Dentro del servicio de Cardiología del Hospital Marqués de Valdecilla hay una unidad de insuficiencia cardiaca que se dedica específicamente a llevar este tipo de pacientes. Se les hace una valoración clínica, se les pone el tratamiento actualizado y se realiza una valoración pronostica del riesgo que tienen de morir. "Se valora también si a lo largo de los próximos meses o años se pueden poner en marcha otras terapéuticas más avanzadas que puedan aumentar la supervivencia, como colocar un desfibrilador o valorar un trasplante cardiaco", indicó el médico.
Entre los pacientes no hay un patrón claro para acudir al especialista. En torno al 30% acude derivado de las consultas de Atención Primaria pero el resto llegan por la vía de urgencias cuando sufren una descompensación "que muchas veces es la primera descompensación y que lleva al diagnóstico de la enfermedad", explicó Cobo.