MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Española del Corazón (FEC), perteneciente a la Sociedad Española de Cardiología (SEC), recuerda que el estado amoroso de una persona puede influir en su salud cardiovascular ya que, entre otras cosas, se ha visto que las personas que divorciadas tienen más riesgo de infarto.
Con motivo de la celebración del Día de San Valentín que se celebra este domingo 14 de febrero, esta entidad recuerda que el estado civil de una persona puede influir en el riesgo de infarto, en especial entre las mujeres, según ha destacado Lorenzo Silva, secretario general de la FEC.
Dicho estudio, publicado el año pasado en la revista 'Circulation', reveló que las mujeres que están divorciadas tienen una probabilidad 1,52 veces mayor de padecer un infarto que las mujeres casadas, mientras que el aumento de la probabilidad en el caso de los hombres es de 1,26 veces.
Asimismo, mientras que en el caso del hombre el volver a casarse reduce este riesgo, en el de la mujer sigue manteniéndose. Así, las mujeres divorciadas que vuelven a casarse tienen una probabilidad 1,35 veces más alta de sufrir un infarto que las mujeres casadas.
"En el único caso en el que el divorcio afecta de forma más elevada también a hombres es cuando estos han sufrido dos o más separaciones en su vida. De todas formas, las cifras en las mujeres siguen siendo más elevadas (dos veces más probabilidad en el caso de las mujeres y 1,38 en el de los hombres)", ha explicado Silva.
Aunque el estudio no analiza el porqué de esta relación, este experto recuerda que está documentada la relación entre el estrés crónico, como puede ser un divorcio, y el aumento del riesgo cardiovascular. El estrés provoca reacciones biológicas en el organismo como aumento de la presión sanguínea, la conocida hormona del estrés o cortisol, y la hemoglobina glicosilada que puede provocar una coagulabilidad de la sangre.
"Se trata de un indicador más del papel que juega el estrés en nuestra salud. Creo que sería interesante considerar el estado amoroso de una persona a la hora de valorar su riesgo cardiovascular", ha destacado el secretario general de la FEC.