MADRID 21 May. (EUROPA PRESS) -
La esofagitis eosinofílica (EoE), una inflamación crónica del esófago mediada por mecanismos inmunológicos, ha pasado en apenas dos décadas de ser una enfermedad poco frecuente a convertirse en la principal causa de atragantamientos y dificultad para tragar en niños y adultos jóvenes, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC).
En España, "al menos 1 de cada 1.000 personas la padece", aunque el número real "podría ser mayor" debido a un retraso diagnóstico medio de entre 4 y 6 años. Según señalan, el notable aumento de casos se atribuye no solo a una mayor capacidad diagnóstica, sino también a cambios ambientales y del estilo de vida occidental, que parecen favorecer respuestas inmunológicas anómalas frente a alimentos y alérgenos.
El reconocimiento de la EoE como una enfermedad crónica ha impulsado el desarrollo de nuevas herramientas diagnósticas y terapéuticas. Entre los avances más relevantes destacan técnicas menos invasivas como el string test, la fibroendoscopia nasal o el sistema EndoFLIP, así como escalas de síntomas validadas y nuevos criterios endoscópicos estructurados.
Sin embargo, en abril de 2024 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha aprobado dupilumab, el primer tratamiento biológico para la EoE en España. Este anticuerpo monoclonal actúa bloqueando las vías inflamatorias IL-4 e IL- 13, claves en la fisiopatología de la enfermedad.
Las coordinadoras del Grupo de Interés en EoE de la SEAIC, González Mendiola y Ávila Castellanos advierten que la EoE aún pasa desapercibida, pero impacta "profundamente" en la calidad de vida. La mayoría de los pacientes son varones jóvenes con antecedentes de asma, rinitis o dermatitis atópica y, a menudo, esta patología se confunde con el reflujo gastroesofágico.