MADRID, 25 Oct. (INFOSALUS) -
Muchas veces los juicios que realizamos tienen muchos indicios de veracidad, como cuando detectamos olor a humo y es más que probable que algo se esté quemando, pero en otras ocasiones las explicaciones a una misma situación podrían ser múltiples y escoger una u otra guiados por los prejuicios podría no ser la mejor opción. El 'Mindfulness' ayuda a entrenar la mente para no dejarnos llevar por la emoción del momento.
Según explica a Infosalus Andrés Martín Asuero, autor de 'Plenamente. Mindfulness o el arte de estar presente" (Planeta, 2015), la capacidad de prestar atención de forma deliberada a lo que ocurre momento a momento y sin juzgar constituye el eje central del 'Mindfulness', un enfoque vital que consiste en tener una actitud abierta hacia lo que pasa en nuestro día a día. Entre sus beneficios está dotar a la mente de mayor resiliencia para responder mejor ante los desafíos vitales y sin impulsividad.
Sobre esta disciplina Martín Asuero apunta que la evidencia científica ha mostrado sus beneficios en tres ámbitos: la búsqueda de la tranquilidad mental y el bienestar, bienes cada vez más escasos por un estilo de vida estresante; la mejora en la atención y concentración, cuando éstas parecen no ser plenas en un entorno de toma de decisiones rápidas y multitarea; y una mejora en las relaciones personales con mejores vínculos afectivos y comunicativos en un mundo moderno donde la conectividad total no siempre implica sentirse acompañado.
"Los juicios y las emociones ante un suceso aparecen muy rápido, en 15 milisegundos, la clave está en no dejarnos llevar sólo por un juicio que constituye una posibilidad y no la única", señala el autor, para quien esta actitud abierta ante nuestro quehacer diario se puede entrenar a través de la práctica formal y la aplicación cotidiana del 'Mindfulness'.
ACTIVAR LA RESILIENCIA MENTAL
En la práctica formal del 'Mindfulness', cuando estamos meditando, sentados y con los ojos cerrados el juicio suele aparecer como una preocupación que denota un miedo e inseguridad. La idea es dejar que este pensamiento se vaya y no retenerlo para trabajar sobre él cuando llegue su momento y volver la atención al ahora.
"De esta forma entrenamos nuestra capacidad para no dejarnos llevar por los pensamientos y ponemos en marcha una relación distinta con ellos para no reaccionar de forma impulsiva cuando se presentan", afirma Martín Asuero. Este entrenamiento gradual en la práctica formal y en su aplicación a aquello que nos sucede a lo largo del día convierte a la mente en más resiliente y capaz de responder mejor a los desafíos sin impulsividad.
Para ello, el autor aconseja identificar primero nuestros principales pensamientos y emociones y cómo vivimos la realidad para luego ir entrenando las distintas habilidades a través del 'Mindfulness': suspender los juicios, regular las emociones, establecer una pausa entre lo que ocurre y cómo respondemos, gestionar mejor el tiempo o saber perdonar.
EJERCICIOS PARA EL 'AQUÍ' Y EL 'AHORA'
El autor señala que aunque es importante sentarse y meditar, lo que hacemos durante el resto del día también es clave para conseguir los beneficios del arte de estar presente. Para comenzar, Martín Asuero propone a los lectores de Infosalus dos ejercicios fáciles explicados de forma más profusa en su libro:
* Práctica formal con las 20 respiraciones conscientes: con una duración de entre 3 y 5 minutos se puede realizar en varios momentos del día. Se recomienda practicar el ejercicio sentado, con los ojos cerrados o con la vista fija en un punto y asegurar que la columna vertebral esté recta aunque sin forzar.
Puedes comenzar notando la postura e intentando eliminar tensiones para luego respirar tres veces de forma profunda y observar el flujo respiratorio en los movimientos de tu cuerpo. Cuando estés preparado intenta contar 20 respiraciones conscientes, por ejemplo de forma cíclica del 1 al 10 y del 10 al 1, pasando de una respiración a otra de forma premeditada.
* Práctica informal con la ducha de plena consciencia: para ello pondremos atención durante el momento de la ducha en el jabón, la temperatura, el cuerpo y no dejaremos que la atención se vaya hacia otros pensamientos, atrayéndola de nuevo cuando esto pase hacia estos elementos del ritual de la ducha. "Es una buena forma de practicar el estar presente, cuidarnos y de prepararse para el día y hacerlo con buen pié", concluye el autor, que pone a disposición de los lectores que adquieran el libro audios gratuitos en su web para realizar los ejercicios.