MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las personas obesas con exceso de grasa visceral (la grasa abdominal que rodea los órganos internos del cuerpo) tienen un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, según un nuevo estudio publicado en 'JAMA', realizado por investigadores de la Universidad Southwestern de Texas. Por el contrario, las personas con exceso de grasa abdominal subcutánea (grasa debajo de la piel) no están en mayor riesgo de diabetes.
Este estudio es uno de los mayores de su tipo en evaluar a una población multiétnica de personas obesas en Estados Unidos utilizando imágenes de tejido adiposo.
"Entre los individuos obesos, no es necesariamente la cantidad de grasa, sino la localización de ésta, lo que conduce a la diabetes", afirma el autor principal del artículo, James de Lemos, profesor de Medicina Interna en Southwestern.
Mediante métodos por imagen para determinar la ubicación y función de la grasa corporal, los investigadores pudieron identificar a las personas obesas con un riesgo mayor de desarrollar diabetes tipo 2, años antes de que apareciera la enfermedad.
"La comprensión de las diferencias biológicas entre la grasa visceral y la grasa subcutánea puede ayudar a los médicos a combatir más eficazmente la epidemia de obesidad que asola Estados Unidos", afirma de Lemos, quien agrega que "el riesgo de diabetes varía ampliamente entre los diferentes individuos obesos y este estudio sugiere que al predecir quién padecerá diabetes será posible orientar el estilo de vida y los tratamientos de los que están en un riesgo más alto".
El estudio, que recopiló información del Estudio del Corazón de Southwestern, muestreó a 732 adultos obesos entre los 30 y 65 años de edad, sin diabetes o enfermedad cardiovascular.
Los investigadores utilizaron imágenes de resonancia magnética (MRI) y energía dual de rayos X (DEXA) para determinar en lugar en el que la grasa se almacena en el cuerpo.
Cuando los participantes regresaron para un seguimiento, después de siete años, los investigadores observaron que el 11 por ciento de las personas muestreadas habían desarrollado diabetes. Entre los participantes con glucosa normal en las pruebas de referencia, el 39 por ciento desarrolló prediabetes o diabetes. Aquellos que desarrollaron prediabetes y diabetes tenían mayores cantidades de grasa visceral y una mayor resistencia a la insulina, en comparación con aquellos que permanecieron sanos.
Según Ian Neeland, primer autor del artículo, "este hallazgo sugiere que el exceso de grasa visceral y la resistencia a la insulina pueden contribuir a la enfermedad cardiovascular en personas obesas".