MADRID 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Departamento de Salud Pública de California (Estados Unidos) han conseguido demostrar que la obesidad extrema fue el principal factor de riesgo de muerte por el virus H1N1, responsable de la Gripe A, en 2009, triplicando el número de fallecimientos a causa de esta enfermedad.
Según los datos que los responsables de este departamento recogieron entre abril y agosto del año pasado, la mitad de los californianos mayores de 20 años que fueron hospitalizados a causa de este mal eran obesos, definiendo la obesidad extrema como un índice de masa corporal (IMC) igual o superior a 40.
"Las personas extremadamente obesas, cuyo IMC supere esa barrera, deben vacunarse anualmente contra este virus, pues el riesgo que corren es muy elevado", ha advertido la autora de esta investigación, la doctora Janice Louie, que ha hecho hincapié en la necesidad de avanzar en los conocimientos sobre la enfermedad y en la relación que mantiene con la obesidad.
En su opinión, estas personas deben consultar a su médico de cabecera en cuanto manifiesten los primeros síntomas de una gripe, "de manera que puedan ser diagnosticadas y tratadas lo antes posible".