MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid aseguran que el consumo de edulcorantes bajos o sin calorías puede jugar un papel beneficioso en la prevención del sobrepeso y el manejo del control metabólico de las personas con diabetes.
Así lo ha reconocido la doctora Pilar Riobó, del Servicio de Endocrinología y Nutrición de dicho centro, en un artículo publicado en la revista 'Nutrición Hospitalaria', en el que hace una revisión sistemática de los estudios realizados en los últimos años en este área y constata que no hay evidencia científica que relacionen estos edulcorantes con la aparición de enfermedades no transmisibles.
Según esta experta, los alimentos o bebidas en los que el azúcar ha sido sustituido por edulcorantes bajos o sin calorías pueden ser beneficiosos "siempre y cuando quien los consume tenga un estilo de vida saludable, realice alguna actividad física y no tome exceso de calorías como compensación de estos alimentos".
En concreto, la evidencia científica ha mostrado que los adultos pueden prevenir el aumento de peso reduciendo unas 100 kilocalorías en su ingesta diaria.
Por ello, defiende Riobó, este tipo de edulcorantes son una "buena herramienta" para conseguir esta meta, siempre que quienes las consumen no ingieran calorías adicionales como compensación.
"Esta compensación se puede producir porque el organismo espera la ingesta de más calorías --y por tanto el individuo tiene una mayor sensación de hambre-- o porque simplemente piensa que puede consumir sin ningún efecto negativo alimentos o bebidas ricos en azúcar, dado que anteriormente ingirió alimentos con edulcorantes hipocalóricos o sin calorías", ha recordado.
Además, un reciente estudio randomizado comparó las bebidas con estos edulcorantes y el agua como apoyo a un programa de pérdida de peso. Y tras 12 semanas, la reducción de peso fue mayor en el primer grupo, que también redujo la sensación subjetiva de hambre o ansiedad, lo que demuestra que "estas bebidas pueden formar parte de una estrategia efectiva para reducir peso".
Esta experta ha reconocido además que los edulcorantes de este tipo que hay actualmente en el mercado "son seguros", como demuestra que se estén utilizando desde hace más de un siglo y están "sujetos a estrictos controles".