MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El miedo a que el virus del ébola se propague por España ha desatado en Madrid y en menos de 24 horas dos falsas alarmas relacionadas con dos pacientes, uno que se encontró indispuesto en la estación sur de autobuses y otro que acudió a un centro de salud de Villaverde con fiebre muy alta.
Precisamente, el caso del centro de salud de Villaverde, el de Los Rosales, disparó las alarmas entre los vecinos de la zona, porque algunos de ellos tuvieron que estar cerca de una hora dentro de las instalaciones sin poder salir.
Fuentes sanitarias y policiales han explicado a Europa Press que sobre las 17 horas se presentó una mujer nigeriana en el centro con un cuadro clínico "dudoso", lo que le llevó a la doctora a pensar que podía tener ébola y la dio traslado al Hospital 12 de Octubre.
Fuentes del centro hospitalario han explicado a Europa Press que el protocolo para estos casos no se llegó ni a activar porque ya llegó al hospital con la enfermedad descartada. Lo llamativo de este caso es el impacto que tuvo entre los vecinos.
Por un lado, el centro fue desalojado después de que estuvieran los usuarios retenidos durante una hora aproximadamente. El vigilante procedió a vaciar el edificio, lo que provocó el nerviosismo entre los vecinos, algunos de los cuales llegaron a llamar a los medios de comunicación para contar lo que estaba pasando.
A las pocas horas, en la estación Sur de autobuses, en Méndez Álvaro, la alarma saltó con un viajero brasileño que llegó anoche y que fue hospitalizado ante el temor a que pudiera tener ébola. Sin embargo, fuentes sanitarias han señalado que se ha descartado y que lo que tiene es malaria.
El hombre, que fue trasladado a la Fundación Jiménez Díaz, fue encontrado tumbado en el suelo en una dársena de la estación sobre las 23.00 horas del jueves, y fue trasladado a la comisaría de la estación, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía.
Los agentes avisaron al Samur porque el hombre afirmó encontrarse mal y los efectivos sanitarios tomaron medidas preventivas puesto que sus síntomas se asemejaban a algunos de los síntomas del ébola. El hombre ha viajado recientemente a África, pero no a los países afectados por la enfermedad --principalmente Guinea, Sierra Leona y Liberia-- sino a Marruecos, Mauritania y Malí.
Además, se decretó el aislamiento de la comisaría de la estación durante 48 horas, mientras cinco funcionarios policiales y dos vigilantes de seguridad fueron trasladados a la central del Samur en la Casa de Campo para desinfectar sus pertenencias. Los siete pudieron volver a sus casas poco antes de las tres de la madrugada.