MADRID 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Numerosas ilusiones visuales se deben a limitaciones en el funcionamiento de nuestros ojos y neuronas visuales y no a procesos psicológicos más complejos, según demuestra una nueva investigación publicada en la revista 'PLoS Computational Biology'.
Los investigadores examinaron ilusiones en las que el entorno de un objeto afecta a la forma en que vemos su color o dibujo.
Científicos y filósofos debaten desde hace tiempo si estas ilusiones se deben al procesamiento neuronal del ojo y los centros visuales de bajo nivel del cerebro, o a procesos mentales de alto nivel, como el contexto y el conocimiento previo.
En el nuevo estudio, el doctor Jolyon Troscianko, de la Universidad de Exeter (Reino Unido), ha codesarrollado un modelo que sugiere que son simples límites de las respuestas neuronales, y no procesos psicológicos más profundos, los que explican estas ilusiones.
"Nuestros ojos envían mensajes al cerebro haciendo que las neuronas se activen más deprisa o más despacio --explica el doctor Troscianko, del Centro de Ecología y Conservación del campus Penryn de Exeter--. Sin embargo, la velocidad a la que pueden dispararse tiene un límite, y en investigaciones anteriores no se había considerado cómo podría afectar ese límite a la forma en que vemos el color".
El modelo combina este "ancho de banda limitado" con información sobre cómo los humanos percibimos patrones a diferentes escalas, junto con la suposición de que nuestra visión funciona mejor cuando contemplamos escenas naturales.
El modelo fue desarrollado por investigadores de las Universidades de Exeter y Sussex para predecir cómo ven el color los animales, pero también se descubrió que predecía correctamente muchas ilusiones visuales observadas por los humanos.
"Esto echa por tierra muchas suposiciones sobre el funcionamiento de las ilusiones visuales", afirma el doctor Troscianko. Según él, los resultados también arrojan luz sobre la popularidad de los televisores de alta definición.
"Los televisores modernos de alto rango dinámico crean regiones blancas brillantes que son más de 10.000 veces más luminosas que sus negros más oscuros, acercándose a los niveles de contraste de las escenas naturales --añade Troscianko--. Cómo pueden nuestros ojos y cerebros manejar este contraste es un enigma, porque las pruebas demuestran que los contrastes más altos que podemos ver los humanos en una sola escala espacial es de alrededor de 200:1. Y lo que es aún más desconcertante, las neuronas que conectan nuestros ojos con el cerebro sólo pueden manejar contrastes de aproximadamente 10:1".
Destaca que este modelo muestra cómo las neuronas con un ancho de banda de contraste tan limitado "pueden combinar sus señales para permitirnos ver estos enormes contrastes, pero la información se 'comprime, lo que da lugar a ilusiones visuales. El modelo muestra cómo nuestras neuronas han evolucionado precisamente para aprovechar toda su capacidad. Por ejemplo, algunas neuronas son sensibles a diferencias muy pequeñas en los niveles de gris a escalas medianas, pero se ven abrumadas fácilmente por los contrastes altos".
"Mientras tanto, las neuronas que codifican los contrastes a escalas más grandes o más pequeñas son mucho menos sensibles, pero pueden trabajar en una gama mucho más amplia de contrastes, dando diferencias profundas de blanco y negro --subraya--. En definitiva, esto demuestra cómo un sistema con un ancho de banda y una sensibilidad neuronal muy limitados puede percibir contrastes superiores a 10.000:1".