MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) -
El experto de la Función Española de Aparato Digestivo (FEAD), médico especialista en aparato digestivo del Hospital Clínico Universitario de Valladolid (HCUV), Luis Fernández Salazar, señala la importancia de que el diagnóstico de la celiaquía sea firme y basado en datos objetivos ya que este implica "la necesidad de seguir una dieta sin gluten toda la vida".
El primer paso para comenzar con un diagnóstico "fiable" es "considerar diferentes diagnósticos posibles y que uno de ellos sea la celiaquía", indica el doctor Fernández Salazar.
Además, el diagnóstico debe plantearse no solo en personas con síntomas susceptibles de celiaquía sino también en "aquellas que tienen más riesgo de padecerla, por ejemplo, aquellas que padecen diabetes de tipo uno o familiares celiacos", declara el doctor Fernández Salazar.
El diagnóstico a seguir para detectar esta enfermedad consiste en "realizar un análisis de sangre en el que se busca la detección de una inmunoglobulina de tipo A frente a la transglutaminasa tisular" y, si este sale positivo, "se comprueba el diagnóstico con una biopsia de la mucosa duodenal", explica el experto.
Sin embargo, pueden darse casos en los que el test de sangre resulte negativo y la sospecha de que se trate de celiaquía sea consistente para lo que es necesario "realizar una biopsia de la mucosa que apoye el diagnóstico de enfermedad celiaca, tener en cuenta otros diagnósticos y comprobar que la dieta sin gluten conduce a una resolución del cuadro", resalta Fernández Salazar.
No obstante, se dan situaciones en las que, aunque no se cumplen los criterios mencionados para el diagnóstico, las personas reconocen una relación muy estrecha entre el consumo de gluten y la aparición de determinados síntomas compatibles con celiaquía. "Esta situación es la que se denomina como 'sensibilidad al trigo no celíaca'", aclara el doctor.
La enfermedad celíaca es una de las patologías más frecuentes en nuestro país y aún hay muchos sin detectar. De hecho, se estima que en España habría hasta un 70% de personas con celiaquía que están sin diagnosticar.