MADRID 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La dieta mediterránea podría tener un papel preponderante en la prevención de la depresión, según asegura el miembro de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Seedo), el doctor Miguel Ángel Martínez-González.
El experto, que acaba de publicar un artículo en la revista especializada 'BMC Medicine' bajo el título 'Dieta, ¿una nueva forma de prevenir la depresión?', sostiene que esta teoría "abre una vía importante al conocimiento".
Para él, el objetivo es "anticiparse a este grave problema de salud pública", el cual se ha convertido "en una auténtica epidemia en la sociedad actual". Además, la obesidad y la depresión una "peligrosa" relación, ya que está demostrado que el exceso de peso se asocia con un mayor riesgo de sufrir cuadros depresivos y viceversa, explica.
Ahondando en la publicación de Martínez-González, se observa que la dieta mediterránea no sólo protege de las enfermedades cardiovasculares y de algunos tipos de cáncer, sino que, además, "puede reducir el riesgo de depresión entre un 40 por ciento y un 50 por ciento".
En su opinión, los alimentos clave para la prevención son "las frutas, los cereales, las legumbres, los frutos secos, el pescado y las verduras". Además, el consumo de ácidos grasos omega 3 y el de aceite de oliva influyen en la estructura de las membranas de las células nerviosas "y mejoran el funcionamiento de la serotonina, un neurotransmisor implicado en la depresión", asegura.
Así lo ha constatado tras realizar este trabajo sobre 10.000 voluntarios y hallar que, en los que se alimentaron de una manera similar a la que se hace en el sur de Europa, la incidencia de depresión tras cuatro años de seguimiento "resultó considerablemente menor que en el resto".
LA OBESIDAD ES MÁS HABITUAL EN LAS CLASES BAJAS
Martínez-González recuerda que la depresión "puede conducir a hábitos dietéticos más pobres", lo que también está demostrado que "acaba derivando en un exceso de peso". De hecho, estudios anteriores han evidenciado que incidencia de la obesidad "es mayor en las clases más desfavorecidas".
Por esta razón, el especialista de Seedo considera "clave" mejorar la educación en los hábitos alimentarios, ya que prevenir a tiempo "es el mejor tratamiento". A tenor de ello, destaca la psicoterapia cognitivoconductual, la cual está indicada "para las personas obesas que sufren depresión".
Por último, esta sociedad avala también diferentes investigaciones sobre la existencia de un componente genético común a los trastornos del estado de ánimo y a la obesidad. Una de las más recientes, que fue realizada por la Universidad de Granada, sostiene que el gen responsable del exceso de peso, el FTO, "también es el responsable de la depresión".