Día del libro: ¿Cuáles son los problemas visuales que afectan a nuestro interés por la lectura?

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Publicado: miércoles, 19 abril 2023 15:20

MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

Con motivo del Día Internacional del Libro, que se celebra este domingo, el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega advierte de que los problemas visuales como la presbicia, el astigmatismo o las cataratas, debido a sus signos y síntomas, podrían llegar a ocasionar pérdida de interés por la lectura.

"La presbicia, también conocida como vista cansada, afecta a prácticamente el 100 por ciento de la población a partir de los 45 años (en miopes puede paliarse durante un tiempo); por ello es el principal problema visual para que las personas abandonen el hábito de leer", advierte el doctor Luis Fernández-Vega Cueto-Felgueroso, del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, quien añade que "la disminución de la capacidad de acomodación del cristalino para ver de cerca provoca, por ejemplo, la necesidad de alejar el libro para ver las letras con más claridad".

Los síntomas de este trastorno se muestran de forma gradual a partir de los 40 años y comienzan a ser clínicamente significativos a partir de los 45, cuando se empieza a necesitar una corrección óptica, así como revisiones oftalmológicas periódicas para vigilar su desarrollo.

Entre otros síntomas, también se dan la sensación de agotamiento en los ojos, la visión borrosa de objetos cercanos, la dificultad para leer letras pequeñas, el empeoramiento de la visión cuando hay poca luz e, incluso, dolores de cabeza recurrentes.

OTROS PROBLEMAS VISUALES QUE AFECTAN A LA LECTURA

El astigmatismo produce una visión borrosa y distorsionada, síntomas que también pueden hacer incómoda la lectura. En España, la prevalencia del astigmatismo significativo (igual o mayor a 1,5 dioptrías) se sitúa en torno al 25 por ciento de la población, lo que la convierte en el tercer problema visual más común entre los españoles, por detrás de la miopía y la presbicia.

Las cataratas, que consisten en la opacidad del cristalino, constituyen otro de los problemas visuales que pueden afectar a la lectura. Aunque la edad es una de las principales causas de esta patología, existen otras como los traumatismos oculares, la herencia genética o el tratamiento con corticoides, entre otras.

Uno de los síntomas más frecuentes de las cataratas es también la visión borrosa. El paciente percibe una neblina que impide la correcta visión, lo que interfiere en actividades cotidianas como la lectura. Llegado a este punto, es imprescindible acudir a un especialista, ya que, en caso de no hacerlo, la evolución de la catarata puede desembocar en una pérdida de visión más avanzada.

UN REFERENTE EN LA IMPLANTACIÓN DE LENTES INTRAOCULARES

En cuanto al tratamiento de estas patologías, actualmente la implantación de una lente intraocular es la mejor opción. En concreto, existen dos tipos de intervenciones: la cirugía sustitutiva, en la que se sustituye el cristalino por uno artificial, y la cirugía aditiva, en la que se implanta una lente sobre el cristalino para compensar parcialmente el defecto de acomodación. La elección de la lente intraocular debe ser personalizada en ambos casos para poder ofrecer al paciente la mejor alternativa.

En el caso de la presbicia, esta cirugía puede empezar a valorarse en torno a los 50-55 años, según el caso. "Desde nuestra amplia experiencia en cirugía del cristalino, recomendamos que el paciente espere a operar la presbicia cuando esté bien establecida, dado que va aumentando poco a poco", explica el doctor Fernández-Vega. "Aconsejamos fijar la edad límite para operar la presbicia en torno a los 55 años, aunque hay casos, como los pacientes hipermétropes, en los que se puede adelantar el procedimiento", ha detallado.

En cuanto al astigmatismo, se puede corregir en la misma cirugía de presbicia o de cataratas, lo que se traduce en un beneficio para los pacientes, ya que, en un mismo acto quirúrgico, se puede mejorar su cantidad y su calidad de visión, así como disminuir o eliminar la dependencia de las gafas. En concreto, está recomendado el uso de lentes intraoculares tóricas.