Determinan qué contaminación del aire por partículas representa el mayor riesgo para la salud

Contaminación, cuidad
Contaminación, cuidad - CEDIDA POR MARCOS GARCÍA RODRÍGUEZ - Archivo
Publicado: viernes, 20 noviembre 2020 7:04

MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los investigadores del Instituto Paul Scherrer (PSI) en Suiza, junto con colegas de varias otras instituciones europeas, han investigado si las partículas de ciertas fuentes pueden ser especialmente dañinas para la salud humana y han encontrado evidencia de que la cantidad de materia particulada por sí sola no es el mayor riesgo para la salud, sino que más bien el llamado potencial oxidativo lo que hace que la contaminación por partículas sea tan dañina, según publican en la revista 'Nature'.

La materia particulada es uno de los mayores riesgos para la salud derivado de la contaminación del aire y, según varios estudios, es responsable de varios millones de muertes cada año. Esto significa que la mala calidad del aire y las partículas se encuentran entre los cinco factores de riesgo para la salud más importantes, junto con la presión arterial alta, el tabaquismo, la diabetes y la obesidad.

Sin embargo, todavía no se conoce con precisión qué hace que la contaminación por partículas sea tan peligrosa. Junto con un equipo de colaboración internacional, los investigadores del Instituto Paul Scherrer PSI han descubierto que la cantidad de partículas contaminantes no es el único factor decisivo cuando se trata de riesgos para la salud.

"En este estudio estábamos interesados principalmente en dos puntos --explica Kaspar Dllenbach, del grupo de investigación de química de aerosoles y fase gaseosa de PSI--. Primero, qué fuentes en Europa son responsables del llamado potencial oxidativo de las partículas (también conocidas como aerosoles) y, segundo, si el riesgo para la salud de estas partículas es causado por su potencial oxidativo".

Aquí, el término 'potencial oxidativo' se refiere a la capacidad de la materia particulada para reducir la cantidad de antioxidantes, lo que puede provocar daños en las células y tejidos del cuerpo humano. En un primer paso, los investigadores expusieron células de las vías respiratorias humanas, las llamadas células epiteliales bronquiales, a muestras de partículas y probaron su reacción biológica.

Cuando estas células están bajo estrés, emiten una sustancia de señalización para el sistema inmunológico, que inicia reacciones inflamatorias en el cuerpo. Los investigadores pudieron demostrar que la materia particulada con un potencial oxidativo elevado intensifica la reacción inflamatoria de las células. Esto sugiere que el potencial oxidativo determina cuán dañino es el material particulado.

La conexión causal entre un elevado potencial oxidativo y un peligro para la salud aún no se ha establecido definitivamente, según Dllenbach. "Pero el estudio es otra indicación clara de que esta conexión realmente existe", añade.

Un estudio asociado dirigido por la Universidad de Berna mostró que las células de los pacientes que padecen una enfermedad especial preexistente, la fibrosis quística, exhiben una defensa debilitada contra las partículas. Mientras que en las células sanas un mecanismo de defensa antioxidante pudo detener la progresión de la reacción inflamatoria, la capacidad de defensa en las células enfermas fue insuficiente. Esto condujo a una mayor mortalidad celular.

Además, los investigadores recolectaron muestras de partículas en varios lugares de Suiza. Utilizando una técnica de espectrometría de masas desarrollada en PSI, analizaron la composición del material particulado. El perfil químico obtenido de esta manera para cada muestra de partículas indica las fuentes de donde se origina.

Además, colegas de Grenoble (Francia) determinaron el potencial oxidativo de las mismas muestras para obtener una indicación del peligro para la salud humana. Con la ayuda de análisis detallados y métodos estadísticos, los investigadores luego determinaron el potencial oxidativo de todas las fuentes de emisión relevantes. Sobre la base de estos datos experimentales, utilizaron un modelo informático para calcular las ubicaciones de Europa con el mayor potencial oxidativo debido al material particulado durante todo el año.

"Nuestros resultados muestran que el potencial oxidativo de la materia particulada y la cantidad de material particulado no están determinados por las mismas fuentes", resume Dllenbach. La mayor parte de la materia particulada consiste en polvo mineral y los llamados aerosoles inorgánicos secundarios, como el nitrato y sulfato de amonio.

El potencial oxidativo de la materia particulada, por otro lado, está determinado principalmente por los llamados aerosoles orgánicos secundarios antropogénicos, que provienen principalmente de la combustión de madera, y por las emisiones de metales del desgaste de frenos y neumáticos en el tráfico rodado.

Los investigadores encontraron no solo que la población de las áreas urbanas está expuesta a una mayor cantidad de materia particulada, pero también que este material particulado en estas regiones tiene un mayor potencial oxidativo y, por lo tanto, es más dañino para la salud que la contaminación por partículas en las zonas rurales.

"Nuestros resultados muestran que la regulación de la cantidad de partículas por sí sola podría no ser eficaz", dice Dllenbach. Además, el estudio de la Universidad de Berna sugiere que los grupos de población con enfermedades preexistentes podrían beneficiarse especialmente de las medidas adecuadas para reducir la contaminación por partículas.