La desincronización entre la maduración nuclear y citoplasmática de los óvulos puede perjudicar el futuro del embrión

Transferencia de embriones en estado de blastocisto.
Transferencia de embriones en estado de blastocisto. - CLÍNIA MARGEN
Publicado: martes, 11 enero 2022 15:39

MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un reciente estudio realizado en diferentes centros de reproducción de Karnataka (India) y publicado en el 'International Journal of Infertility & Fetal Medicine' confirma las sospechas de que la maduración nuclear y citoplasmática suelen estar desincronizadas en los óvulos resultantes de la estimulación ovárica para la fecundación 'in vitro' (FIV), lo que puede afectar al futuro de los embriones.

Estos óvulos obtenidos por la estimulación ovárica muestran una fuerte tendencia hacia una aceleración de la maturación nuclear con respecto a la citoplasmática, algo que puede resultar en el fracaso de su evolución, condicionando el futuro de los embriones y el éxito de tratamiento.

La maturación citoplasmática consiste en la formación de las moléculas (ARN y proteínas) importantes para la regulación precisa de la evolución de los embriones antes de la activación de su propia actividad genética. Esto llevará a la síntesis endógena de ARN y proteínas desde el ADN del embrión.

Esta última se produce relativamente tarde (2-3 días después de la fecundación) en los humanos en comparación con otras especies de mamíferos. Este retraso favorece la desincronización después de la FIV, antes de que el óvulo fecundado se divida, y mientras es completamente dependiente de la información genética del origen maternal.

Ambos eventos tienen que ocurrir de una manera sincronizada para dar lugar a un embrión viable. Sin embargo, la maduración nuclear y citoplasmática pueden quedar desincronizadas en el tiempo, lo que crea un problema para el futuro del embrión.

La desincronización entre la maturación nuclear y citoplasmática es más fácil de detectar durante las primeras horas después de la FIV, antes de que el óvulo fecundado se divida. Más tarde, los defectos eventuales pueden ser difícilmente detectables.

De acuerdo con las observaciones previas del doctor Jan Tesarik, director de la clínica MARGen de Granada e investigador de este tema, un cultivo 'in vitro' de los óvulos antes de realizar la FIV puede corregir esta desincronización y aumentar la calidad de los embriones resultantes y su capacidad de implantarse en el útero materno.

De hecho, los óvulos resultantes de la estimulación ovárica tienden a acelerar su maturación nuclear y retrasar la maturación citoplasmática. Pero sabiendo que los productos de la maturación citoplasmática tienen que gobernar el desarrollo de los embriones humanos durante 2-3 días después de la fecundación, antes de que los productos del ADN nuclear embrionario sean completamente operativos, el retraso de la maturación citoplasmática puede tener "efectos irreparables", según Tesarik.

Los autores del estudio proponen un tratamiento de los embriones con una sustancia que frena la maturación nuclear, la cilostamida, para permitir su sincronización con la maturación citoplasmática. Sin embargo, según el doctor Jan Tesarik y la doctora Raquel Mendoza Tesarik, directores de la clínica MARGen de Granada, "todavía es muy pronto para garantizar si este tratamiento es seguro de cara al desarrollo del futuro bebé".