MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una nueva tecnología podría adelantar hasta 60 minutos el proceso de transferir a un paciente con accidentes cerebrovasculares desde la tomografía hasta la sala de operaciones, según un estudio llevado a cabo por los expertos de la Sociedad de Cirugía NeuroIntervencional (SNIS).
"Al utilizar esta tecnología en la angiosuite, los hospitales pueden reducir los retrasos en la transferencia dentro de las instalaciones y, por lo tanto, el tiempo de inicio de los síntomas de ACV, lo que reducirá significativamente el daño cerebral y mejorará los resultados para los pacientes", ha declarado el autor principal del estudio y un técnico en investigación clínica intervencionista en el Toronto Western Hospital, Nicole Cancelliere.
Los resultados preliminares muestran que el 'software' de formación de imágenes de haz cónico se compara favorablemente con las exploraciones de TC basales y de seguimiento. Las imágenes permiten una detección precisa de la hemorragia, el sitio de oclusión, el núcleo isquémico y el tejido en riesgo, lo que sugiere que la obtención de imágenes basales se puede realizar en la angiosuite mediante imágenes con haz de cono.
"Al reducir los tiempos de transferencia dentro de las instalaciones, los pacientes pueden recibir el tratamiento EVT antes, lo que puede afectar significativamente los resultados de los pacientes", ha manifestado el profesor Vitor Mendes Pereira.
En conclusión, el estudio 'Nueva evaluación múltiple de TC de pacientes con accidente cerebrovascular agudo: ¿estamos preparados para el horario de máxima audiencia?', muestra que los avances recientes en el 'software' de imágenes en angiosuite ayudan a los neurointervencionistas los detalles esenciales necesarios para diagnosticar a un paciente con oclusión de grandes vasos (LVO) trombectomía (EVT).