MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Centro de Biología Molecular 'Severo Ochoa', centro mixto de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han demostrado que el factor neurotrófico derivado del cerebro es capaz de prevenir la degeneración de neuronas causada por la deficiencia de frataxina, proteína responsable de la aparición de la ataxia de Friedreich, lo que podría abrir la puerta a futuros tratamientos contra esta enfermedad hereditaria que de momento no tiene cura.
Esta dolencia está causada por mutaciones recesivas que provocan una disminución drástica en los niveles de frataxina, una proteína que juega un papel fundamental en la formación de los centros hierro-azufre que, a su vez, son esenciales para la función de diferentes proteínas celulares; incluyendo los complejos responsables de la producción de energía en las mitocondrias.
El trabajo, cuyos resultados publica la revista 'Molecular Therapy', buscaba esclarecer las bases moleculares de la neurodegeneración en la ataxia de Friedreich con el objetivo de desarrollar terapias que puedan ser eficaces para su tratamiento.
La deficiencia de frataxina provoca la degeneración de ciertas neuronas en el cerebelo y la médula espinal. A consecuencia de ello, los pacientes con ataxia de Friedreich experimentan problemas en la coordinación de sus movimientos, que van empeorando hasta que muchos de ellos se ven abocados a utilizar una silla de ruedas.
Los síntomas comienzan, normalmente, entre los 5 y los 15 años, aunque también pueden tener un inicio mucho más precoz o tardío. Además, los pacientes pueden sufrir problemas no neurológicos como escoliosis, cardiomiopatía o diabetes.
Lo que han visto ahora es que el factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF) es una proteína secretada, principalmente, en el Sistema Nervioso (SN), que estimula la supervivencia de las neuronas y la función sináptica (comunicación entre neuronas). Numerosos estudios han demostrado que tiene un papel protector en algunos modelos de daño neuronal.
EVITA LA MUERTE NEURONAL EN CULTIVOS CELULARES Y EN ANIMALES
Así, han demostrado que la transferencia del gen que codifica el BDNF a las neuronas es capaz de evitar la muerte neuronal en cultivos celulares en los que se induce la deficiencia de frataxina.
Un efecto neuroprotector que se observa también 'in vivo', ya que "cuando se induce la deficiencia de frataxina en el cerebelo de ratones, se observa la muerte y atrofia de distintos tipos de neuronas", ha explicado Javier Díaz-Nido, uno de los autores del estudio.
Y como consecuencia, los ratones sufren una disminución significativa de su capacidad para coordinar sus movimientos, unos cambios patológicos que se previenen con la transferencia del gen que codifica el BDNF.
Aunque se trata de un trabajo de investigación básica con un modelo animal, este estudio sugiere nuevas vías de intervención terapéutica para la ataxia de Friedreich, bien basadas en la terapia génica con factores neurotróficos o bien basadas en el uso de fármacos capaces de mimetizar la acción de dichos factores.