MADRID 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un estudio, realizado en ratones y dirigido por neurocientíficos de la Facultad de Medicina de Harvard (Estados Unidos), desvela nuevos conocimientos sobre cómo se comunican las neuronas del cerebro durante una decisión y cómo las conexiones entre neuronas pueden ayudar a reforzar una elección.
Se trata del primer trabajo en combinar análisis estructurales, funcionales y conductuales para explorar cómo las conexiones entre neuronas apoyan la toma de decisiones.
En la investigación, se pidió a los ratones que eligieran qué camino tomar en un laberinto para encontrar una recompensa.
Los investigadores descubrieron que la decisión de un ratón de ir hacia la izquierda o hacia la derecha activaba grupos secuenciales de neuronas, culminando en la supresión de neuronas vinculadas a la elección opuesta.
Estas conexiones específicas entre grupos de neuronas pueden ayudar a esculpir decisiones al cerrar las vías neuronales para opciones alternativas.
De esta forma, se registró la actividad neuronal mientras los ratones recorrían un laberinto en forma de T en realidad virtual.
Una señal, que ocurrió varios segundos antes, indicó a los ratones si una recompensa estaría en el brazo izquierdo o derecho de la T.
El laboratorio de Lee utilizó potentes microscopios para mapear las conexiones estructurales entre las mismas neuronas registradas durante la tarea del laberinto.
Al combinar modalidades, los investigadores distinguieron las neuronas excitadoras (aquellas que activan otras células) de las neuronas inhibidoras, que suprimen otras células.
Descubrieron que un conjunto específico de neuronas excitadoras se activaba cuando un ratón decidía girar a la derecha, y estas neuronas de "giro a la derecha" activaban un conjunto de neuronas inhibidoras que frenaban la actividad de las neuronas de "giro a la izquierda".
Lo contrario sucedió cuando un ratón decidió girar a la izquierda.
Así, cuando el animal expresa una elección, el cableado del circuito neuronal puede ayudar a estabilizar esa elección al suprimir otras opciones.
Este podría ser un mecanismo que ayuda a un animal a mantener una decisión y previene 'cambios de opinión'.
Finalmente los investigadores recuerdan que estos hallazgos deben confirmarse en humanos.