MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Carolina del Norte (Estados Unidos) han desarrollado un parche cardíaco con pequeños vasos sanguíneos que mejoran la recuperación de los infartos de miocardio (IM) en ratas y cerdos.
Para tratar eficazmente el IM, el tejido del músculo cardíaco perdido debe regenerarse y deben formarse nuevos vasos sanguíneos para devolver el oxígeno y los nutrientes a las células. Los científicos han intentado desarrollar parches que contienen varias células terapéuticas para tratar el IM, pero hasta ahora la mayoría han sido demasiado engorrosos para fabricarlos, o no restauran tanto el músculo cardíaco como el suministro de sangre en el sitio lesionado.
Estos investigadores desarrollaron previamente un parche cardíaco pre-vascularizado relativamente fácil de hacer, que contenía microvasos de ingeniería en un gel de fibrina con puntas de células estromales cardíacas. Cuando se implantó en ratas después de un IM, las células del parche secretaban factores de crecimiento que hacían que el músculo cardíaco y los vasos sanguíneos volvieran a crecer. Ahora, los investigadores querían probar el parche más a fondo en ratas, así como en cerdos, que tienen sistemas cardiovasculares más parecidos a los de los humanos que a los de los roedores.
En su trabajo, publicado en la revista 'ACS Biomaterials Science & Engineering', Los investigadores implantaron el parche cardíaco en ratas que recientemente habían sufrido un ataque al corazón. Cuatro semanas más tarde, las ratas que recibieron el parche tenían menos tejido cicatricial, un aumento del músculo cardíaco y una mejor función de la bomba cardíaca en comparación con las ratas no tratadas.
El equipo observó efectos similares en cerdos que habían sufrido un infarto de miocardio y fueron tratados con los parches. El parche aumentó el reclutamiento de las células progenitoras de los cerdos en la zona dañada y potenció el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos, así como disminuyó la muerte de células cardíacas y suprimió la inflamación.
Aunque en estudios anteriores se han utilizado células formadoras de vasos sanguíneos o vasos sanguíneos naturales para vascularizar los parches cardíacos, este estudio es el primero en demostrar el éxito de los parches de células estromales cardíacas pre-vascularizadas que utilizan vasos sanguíneos sintéticos micro-diseñados para tratar el IM en un modelo animal grande. Se necesitan más estudios sobre los mecanismos, la seguridad y la eficacia de la reparación de parches antes de que la tecnología pueda aplicarse a los humanos, según los investigadores.