Simula las comunicaciones entre proteínas dentro de las células de las articulaciones
BARCELONA, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del BCN MedTech de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona ha definido un nuevo modelo computacional que simula las comunicaciones entre las proteínas dentro de las células de las articulaciones y que permite identificar mejor los factores que provocan la artrosis en cada paciente.
Esta investigación, publicada en la revista 'Frontiers in Bioengineering and Biotechnology', se ha elaborado conjuntamente con tres investigadores del Barcelona Centre for New Medical Technologies (BCN MedTech) del departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de la UPF (DTIC), ha informado la universidad en un comunicado de este viernes.
La creación de este modelo computacional es "especialmente relevante" ya que los investigadores señalan que los factores que provocan esta patología pueden ser diferentes en cada persona, por lo que identificar cuáles son las causas concretas en cada caso es clave para desarrollar futuros tratamientos más personalizados y eficaces contra la artrosis.
El artículo se centra en la artrosis --u osteoartritis--, enfermedad debida a la pérdida del cartílago de las articulaciones, que es el tejido que recubre la parte final de los huesos largos para asegurar el buen funcionamiento de las articulaciones y amortiguar los posibles golpes que pueden recibir a lo largo de la vida.
La modalidad de la artrosis más común e incapacitante es la artrosis de rodilla, y durante el desarrollo de la enfermedad los pacientes suelen experimentar "dolores intensos en las articulaciones afectadas y pérdida de movilidad", lo que comporta dolor crónico, depresión o insomnio y que, debido al malestar, incrementen sus conductas sedentarias.
El investigador principal del estudio, Jérme Noailly, ha asegurado que con las técnicas existentes en la actualidad "es extremadamente complejo" que los médicos puedan determinar las causas que han provocado la artrosis en cada paciente y decidir el tratamiento más adecuado según el caso.
Actualmente, "solo existen tratamientos paliativos" de la artrosis en forma de ejercicio, analgésicos o cirugías para la implantación de prótesis --de rodilla o cadera, entre otras--, y debido al origen multifactorial de la enfermedad, ha sido especialmente difícil encontrar terapias eficaces contra su progresión o regenerar el cartílago dañado.
EL MODELO
La definición de este modelo se centra en examinar cómo impactan los estímulos mecánicos e inflamatorios sobre las células del tejido cartilaginoso de las articulaciones, y se ha estudiado el comportamiento bajo condiciones homeostáticas, que representan situaciones sanas o seguras; bajo condiciones proinflamatorias; en situaciones mecánicas adversas y cuando se aplica una terapia regenerativa de cariz antiinflamatorio.
El estudio ha concluido que las moléculas proinflamatorias son las que en mayor medida causan y hacen progresar la enfermedad, y ha podido constatar que las conductas sedentarias "favorecen el dolor de origen inflamatorio" derivado de la artrosis.
También ha determinado que los tratamientos de la artrosis basados en moléculas antiinflamatorias del propio paciente "pueden ayudar a disminuir las señales de dolor de origen inflamatorio", y ha indicado que las sobrecargas mecánicas --por ejemplo, por los excesos de peso-- inhiben el potencial regenerativo del cartílago.