MADRID 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y de la Universidad Estatal de Arizona, en Estados Unidos, han descrito una nueva teoría para explicar las bases de las conductas obsesivas o los 'tics', que según apuntan podrían generar una recompensa al igual que otros comportamientos, como comer o dormir.
El estudio, publicado en la revista 'Learning & Behavior', ofrece una nueva visión a la que mantenida durante décadas por la comunidad científica, que pensaba que los mecanismos que originan estas acciones, denominadas adjuntivas por realizarse sin obtener nada a cambio, no tenía nada que ver con el de otros comportamientos que sí generan una recompensa, llamados operantes.
Tras una revisión de decenas de estudios los investigadores han concluido que las conductas adjuntivas son en realidad un tipo de comportamiento operante porque sí existe un trofeo, pero que se demora en el tiempo.
De hecho, en uno de los estudios con ratones analizados vieron como los científicos les suministraban pequeñas bolas de comida con intervalos temporales y comprobaban cómo se repetía la conducta en cuestión.
El mismo experimento también abordaba la bebida de líquidos. "Las ratas beben sin tener sed, pero no lo hacen porque sí: su comportamiento es sensible a las consecuencias", ha explicado a SINC Ricardo Pellón, investigador del departamento de Psicología Básica I de la UNED y uno de los autores del trabajo.
Además, las variables motivacionales que mueven ambas conductas son similares y están relacionadas con el organismo (como puede ser el nivel de hambre) y con la recompensa (cantidad de comida suministrada).
La revisión bibliográfica dibuja un nuevo marco teórico, pero que falta por confirmar con nuevos experimentos. "Tenemos que validar que la teoría es cierta y por eso estamos empezando un nuevo proyecto, centrado en estudios de comportamientos diferentes a la bebida en la rata de laboratorio, para probar su generalización", ha indicado Pellón.
De confirmarse, el nuevo modelo teórico propuesto tendría implicaciones en la base de determinadas patologías, como los trastornos obsesivo-compulsivos.
"Si las conductas son operantes se pueden modificar con las mismas técnicas", adelanta el investigador de la UNED, por lo que el tratamiento podría ser diferente, centrado en una terapia conductual, que actuara como complemento de los fármacos prescritos al paciente.
La anorexia también podría abordarse desde este nuevo marco teórico, puesto que numerosas conductas adjuntivas desarrolladas por los pacientes, como el ejercicio físico excesivo, podrían tratarse de otra forma.