PALMA, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigadores de la Universitat de les Illes Balears (UIB) y del Instituto de Investigación Sanitaria de las Islas Baleares (IDISBA) ha desarrollado una metodología que permite predecir la evolución de la severidad de la COVID-19 en menos de tres horas.
En una nota de prensa, la UIB ha explicado que esta metodología hace posible que los médicos puedan anticipar qué pacientes probablemente evolucionen hacia un pronóstico clínicamente severo o si será favorable.
Estos resultados se han recogido en un estudio publicado recientemente en la revista científica 'Open Forum Infectious Diseases', editada por la Infectious Diseases Society of America.
En este trabajo, los investigadores confirman la validez de esta metodología, que se ha testado con éxito en pacientes atendidos en el Hospital Universitario Son Espases.
El estudio ha sido desarrollado por investigadoras del Instituto Universitario de Investigaciones en Ciencias de la Salud (IUNICS) y de los Servicios Científico-Técnicos de la UIB, con la colaboración de investigadoras del Servicio de Microbiología y del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario Son Espases.
El punto de partida de los investigadores era la hipótesis de que el virus SARS-CoV-2, responsable de la COVID-19, induce cambios en los niveles de determinadas proteínas que se puedo detectar en el suero de los pacientes gravas.
Gracias al estudio, han podido comprobar que estos cambios se pueden observar mediante el análisis por espectrometría de masas, unas técnicas que permiten detectar con mucha precisión y sensibilidad prácticamente todas las proteínas que están presentes en una muestra.
La metodología desarrollada por los investigadores de la UIB se basa en el análisis por MALDI-TOF del suero de los pacientes que define los perfiles peptidómicos, que es la información sobre las proteínas que se encuentra en la sangre de un individuo.
Según la información que se extrae del análisis sobre las proteínas, y los asocia a unas variables que permita anticipar la evolución de la enfermedad desde los estadios iniciales. La ventaja de esta técnica es que se basa en un número amplio de biomarcadores, en contraposición con otra técnicas que solo se basan en unos cuantos, con lo cual sus resultados son más sólidos.
El equipo de investigadores de la UIB que participa en este proyecto está liderada por el doctor Sebastián Albertí, catedrático de Microbiología, del grupo de investigación en resistencia antibiótica y Patogenia de las infecciones bacterianas y director de los Servicios Científico-Técnicos (SCT) de la UIB.