MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El hirsutismo, o aparición de vello en zonas como los hombros o la espalda, la alopecia, la piel seca o la fragilidad de las uñas son algunas de las consecuencias que trae para la piel la anorexia, según advierte la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
Según los expertos de la EDV, además de las graves consecuencias en la salud física y emocional que genera esta enfermedad, entre las que se cuentan el miedo a ganar peso o la alteración de la percepción corporal, también "cala hondo en la piel de los afectados".
Uno de los problemas de piel que genera es el hirsutismo o lanugo por todo el cuerpo, es decir, la aparición de vello en lugares poco comunes y el incremento de vello en la barba y el bigote.
Asimismo, provoca alopecia o pérdida difusa del pelo en el cuero cabelludo, pudiendo llegar a formarse, según los dermatólogos, "un aclaramiento importante". "Si la anorexia no se resuelve, puede convertirse en alopecia crónica", apuntaron.
Además, la falta de nutrientes dificulta también la proliferación y diferenciación de las células de la epidermis, que maduran incorrectamente y se vuelve seca, descamativa y sin brillo. Así, señalaron, "las infecciones superficiales se hacen más frecuentes".
Por su parte, la uñas "pierden flexibilidad y se fragmentan con facilidad", apareciendo "estrías y despegamiento del borde, con pérdida en láminas de la parte distal", indicaron.
La anorexia es un trastorno alimentario que afecta sobre todo a mujeres entre 15 y 25 años y que, a pesar de tener buen pronóstico en el 44 por ciento de los casos, acaba en muerte en otro 5 por ciento.
Las secuelas físicas y psicológicas que genera pueden curarse con una normalización de la dieta; psicoterapia de apoyo, y tratamiento farmacológico, basado en inhibidores de la recaptación de serotonina.
Otros problemas que trae la anorexia son el rechazo a mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal considerando la edad y la talla, y en las mujeres pospuberales, amenorrea, con ausencia de al menos tres ciclos menstruales consecutivos.