El estudio del IrsiCaixa permitirá ahorrar tratamientos más caros en casos innecesarios
BARCELONA, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa han concluido que a la hora de decidir el tratamiento antirretroviral para una persona infectada por el VIH, la presencia de virus resistente es relevante cuando al menos un 5% de los virus de la muestra presenten mutaciones de resistencia.
El estudio, publicado en 'The Lancet HIV', ha definido el umbral a partir del cual la presencia de VIH resistente requiere un tratamiento específico, y ha indicado que cuando se baja del 5%, el tratamiento fallará en más casos, lo que puede ahorrar el uso de tratamientos más caros en casos en que no son realmente necesarios, ha explicado el centro en un comunicado
La International AIDS Society-USA ya ha tenido en cuenta estos resultados en sus recomendaciones sobre el manejo de resistencias del VIH a nivel global, un problema emergente reconocido por la Organización Mundial de la Salud.
Las técnicas de secuenciación masiva en los test de resistencias tratan de combatir el sobrecoste que supone dedicar un tratamiento innecesario a alguien, pero su aplicación se encuentra en entredicho debido a la falta de consenso sobre el umbral a partir del cual se deben tener en cuenta las resistencias a la hora de prescribir el tratamiento para un paciente.
"En los países de recursos escasos, se prescriben medicamentos de primera línea a todas las personas infectadas siempre y cuando no tengan un virus resistente, en cuyo caso reciben tratamientos de segunda línea, más escasos y caros", ha explicado el investigador principal del grupo de Genómica Microbiana de IrsiCaixa, Roger Paredes.
"Queríamos evaluar si una variante presente en un 10%, un 5% o incluso un 1% podía ser determinante", para establecer un punto de corte para no suministrar un medicamento más caro de forma innecesaria, ha destacado Paredes, también médico del Hospital Germans Trias i Pujol en Badalona (Barcelona).
Los investigadores del IrsiCaixa --institución impulsada conjuntamente por la Obra Social La Caixa y la Conselleria de Salud de la Generalitat-- analizaron muestras de pacientes de Kenia, Nigeria, Sudáfrica, Uganda y Zambia.
El estudio, realizado en colaboración con el Amsterdam Institute for Global Health and Development, ha indicado que si el umbral se sitúa en un mínimo del 20% de virus con mutaciones de resistencia, se pronostica que la primera línea no servirá a causa de las resistencias en un 12% de los casos.
Si el umbral se reduce al 10%, los medicamentos de primera línea no servirán en un 13%, mientras que si se reduce el 5%, lo harán en un 15%, y con un 1%, en un 17%.
A pesar de esto, han destacado que a partir de cierto umbral este aumento de la sensibilidad implica también una reducción de la especificidad, lo que hace que el test de resistencias sugiera que habrá más fallos de tratamiento de los que realmente hay.
"USO MÁS RACIONAL DE LOS RECURSOS"
"Estos resultados sugieren que un buen punto de corte podría ser el 5%, que es el que nos permite predecir mejor el éxito de los tratamientos. Así podemos mejorar la calidad asistencial de cada paciente haciendo un uso más racional de los recursos, lo que nos posibilita llegar a más personas", ha señalado Paredes.
"Es una muestra de cómo la investigación en África es beneficiosa también para la práctica clínica que llevamos a cabo en occidente, donde los pacientes también se verán beneficiados de una precisión que les permitirá recibir el fármaco más adecuado para su caso particular", ha añadido.