MADRID 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El déficit de vitamina D se relaciona con un mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, incluidas la enfermedad coronaria e insuficiencia cardiaca, e hipertensión, según han recogido diversos estudios a los que ha hecho referencia el jefe de la Sección de Arritmias del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario Puerta de Hierro y presidente electo de la Sociedad Española de Cardiología, Ignacio Fernández Lozano.
Fernández ha explicado que un análisis prospectivo de 2010 con información de los niveles de 25-hidroxivitamina D de 41.504 sujetos indicó que un 63,6 por ciento de ellos tenían niveles de 25-hidroxivitamina D menores de 30 ng/ml. Estos datos estuvieron inversamente asociados con una mayor incidencia de enfermedad arterial coronaria, infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca y accidente cerebrovascular.
Si bien en la práctica clínica la importancia del sistema endocrino de la vitamina D ha sido interiorizada por muchos grupos de especialistas, como los endocrinólogos o los médicos de atención primaria, entre otros, parece ser todavía una asignatura pendiente entre los cardiólogos.
"Aunque la relación entre niveles bajos de 25-hidroxivitamina D y enfermedad cardiovascular está muy bien establecida, no existe una evidencia solida que nos oriente sobre niveles adecuados de 25-hidroxivitamina D en cardiología. En este tema, los cardiólogos tenemos que hacer un ejercicio de humildad y adaptarnos a las recomendaciones de otras especialidades como reumatólogos, endocrinos o internistas", ha aseverado el especialista.
Fernández ha insistido en la necesidad de concienciar a los especialistas en cardiología clínica de la importancia de detectar el déficit de vitamina D con el fin de mejorar la prevención y el tratamiento de enfermedades cardiovasculares. "Los cardiólogos no somos los especialistas que estamos más concienciados sobre la importancia de la vitamina D. Afortunadamente, los datos de su eficacia en pacientes ingresados por insuficiencia cardíaca congestiva 12 y la publicación del estudio D-Health empiezan a cambiar las cosas", ha detallado.
Por otra parte, el cardiólogo ha apuntado a un estudio de hace 40 años, donde ya se reveló que el aumento de las enfermedades cardiovasculares en invierno podía ser un resultado de bajas concentraciones de vitamina D como consecuencia de una menor exposición a la luz solar.
Algunos estudios señalan que la suplementación con vitamina D podría ayudar a reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Como señala el presidente de la Sociedad Española de Cardiología, "la mejor evidencia del uso de suplementos de vitamina D y enfermedad cardiovascular la encontramos en el estudio D-Health". Dicha investigación concluyó que la incidencia de enfermedad cardiovascular fue menor en los pacientes que recibieron suplementos de vitamina D, especialmente entre aquellos que tomaban fármacos cardiovasculares al comienzo del estudio.