ALICANTE, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un estudio realizado en la zona mediterránea por el servicio de Cardiología del Hospital General Universitario de Elche (Alicante) ha puesto de manifiesto que la presencia de anemia en pacientes que han sufrido un infarto agudo de miocardio se asocia a mayores complicaciones cardiovasculares durante el seguimiento, así como a un mayor número de hemorragias futuras en estos pacientes.
En un comunicado, el centro ha detallado que el infarto de miocardio es una de las manifestaciones más graves de las enfermedades cardiovasculares y que representan la primera causa de muerte en España, por delante del cáncer y de las enfermedades respiratorias. Cada año se registran unos 120.000 infartos de miocardio.
Sin embargo, con los avances médicos y la aplicación de medidas preventivas, en la última década se ha producido un descenso de la mortalidad por infarto, de las 22.000 muertes en el año 2006 a cerca de 15.000 fallecimientos en el 2016.
El infarto agudo de miocardio se produce cuando una de las arterias coronarias que llevan la sangre al corazón se obstruye. La principal causa de esta obstrucción es la aterosclerosis coronaria (un depósito de colesterol en la pared de la arteria) que suele desarrollarse durante años favorecido por la presencia de tabaquismo, hipertensión arterial, diabetes mellitus o colesterol alto.
Esta placa de aterosclerosis puede, súbitamente, romperse y activar la coagulación de la sangre con formación de trombos o coágulos, que ocluyen la luz del vaso produciendo el infarto de miocardio.
Ahora, la investigación, liderada por la especialista Nuria Vicente, en colaboración con el Hospital General de Alicante y el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, se ha centrado en el estudio de 1.717 pacientes que habían sufrido un infarto agudo de miocardio y a los que se determinó los niveles sanguíneos de hemoglobina (glóbulos rojos) mediante una analítica ordinaria y fueron seguidos durante un año.
Los resultados del trabajo han puesto de manifiesto que aquellos pacientes que presentaban anemia (niveles de hemoglobina más bajos en sangre) tenían más complicaciones en el seguimiento, con una mayor mortalidad.
Según Pedro Morillas, jefe de Cardiología del Hospital General Universitario de Elche, "el hallazgo de anemia en el seno de un infarto agudo de miocardio debe ponernos en alerta ante la presencia de un paciente que puede sufrir complicaciones durante el seguimiento, lo que nos obliga a llevar un control más estrecho en el tratamiento y control de su enfermedad y a sopesar cuidadosamente el riesgo de hemorragia con el riesgo trombótico".
"Los resultados del estudio han tenido tal impacto que han sido publicados en una de las mejores revistas europeas de Medicina, la revista European Journal of Internal Medicine", comenta el doctor Morillas.
AVANCES
En el campo de la cardiología se está asistiendo en los últimos años a un gran avance tanto en el tratamiento médico (con nuevos fármacos antiagregantes, más potentes) como en el manejo percutáneo de las lesiones coronarias de los pacientes que han sufrido un infarto de miocardio y que han mejorado de manera significativa el pronóstico.
"El equipo de cardiología del Hospital de Elche sigue apostando por la investigación en el campo de las enfermedades cardiovasculares participando junto con otros hospitales en importantes líneas de investigación nacional e internacional con significativos resultados para el manejo diario de los pacientes con enfermedades cardiológicas", ha expuesto Nuria Vicente.