El crecimiento del corazón lo controlan dos proteínas

Guadalupe Sabio y Bárbara González-Terán, científicas del CNIC
CNIC/IVANA NIKOLIC
Actualizado: viernes, 22 enero 2016 12:43

   MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) han identificado por primera vez dos proteínas, p38 gamma y p38 delta, cuya función es controlar el crecimiento del corazón y su adaptación a la presión arterial alta o hipertensión.

   Los resultados, que se describen en el último número de la revista 'Nature Communications', no solo ayudarán a comprender mejor los mecanismos que utilizan las células cardiacas para crecer y adaptarse, sino que también podrían servir para diseñar nuevas estrategias para tratar los fallos cardiacos provocados por el excesivo crecimiento del corazón.

   Dependiendo de las necesidades de cada etapa de la vida, el corazón se adapta modificando su tamaño para adaptarlo al del resto del cuerpo, incluso durante el embarazo. Sin embargo, hay situaciones específicas y temporales como el ejercicio físico excesivo, la hipertensión arterial y la obesidad que pueden provocar un crecimiento excesivo del corazón, una situación que puede llegar a derivar en un ataque cardiaco.

   En este trabajo, dirigido por las investigadores Bárbara Gonzalez-Terán y Guadalupe Sabio, han visto que las dos proteínas descritas regulan el crecimiento del ventrículo izquierdo, la cámara principal de bombeo y la cavidad más grande y fuerte del corazón.

   Y utilizando roedores que carecían de estas proteínas, han demostrado que su ausencia hace que los animales tengan un corazón más pequeño, aunque perfectamente funcional, que es incapaz de responder frente estímulos externos, como puede ser la presión arterial alta.

   Este descubrimiento, comentan las investigadoras, sirve para comprender mejor los mecanismos que utilizan las células cardiacas para crecer y adaptarse. "La nueva información podría facilitar el diseño de nuevas estrategias para luchar contra las anomalías cardíacas provocadas por el crecimiento anómalo del músculo cardiaco", según Sabio.

   Hasta ahora la única vía de evitar este crecimiento excesivo se basa en el control de la presión arterial, por lo que el hecho de conocer los genes que controlan este proceso ayudará a entender mejor las formas comunes de las enfermedades cardíacas y a comprender cómo el corazón es capaz de adaptarse y crecer de manera fisiológica en función de las necesidades del organismo.