MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Escuela de Ingeniería y Ciencias Aplicadas John A. Paulson de Harvard y de la Universidad de Xi'an Jiaotong en China han desarrollado un nuevo tipo de adhesivo que puede pegarse fuertemente a materiales húmedos, como hidrogel y tejido vivo, y desprenderse de forma sencilla con una frecuencia específica de luz.
Estos adhesivos, informan desde las instituciones, podrían usarse para unir y separar sin dolor los apósitos que se ponen en las heridas, los dispositivos de administración transdérmica de fármacos y la robótica portátil.
"La adhesión fuerte generalmente requiere enlaces covalentes, interacciones físicas o una combinación de ambos", explica el autor del artículo e investigador de la Universidad de Xi'an Jiaotong, Yang Gao. Sin embargo, la adhesión a través de enlaces covalentes es "difícil de eliminar" y la adhesión a través de interacciones físicas "suele requerir solventes, que pueden llevar mucho tiempo y ser dañinos para el medio ambiente", aclara el experto.
Por este motivo, se ha elegido como método para despegar los adhesivos la luz, "desencadenando el desprendimiento de forma no invasiva e indolora", según Gao. El adhesivo utiliza una solución acuosa de cadenas de polímero distribuidas entre dos materiales no pegajosos. Estas cadenas actúan como una sutura molecular, uniendo los dos materiales entre sí para formar una red con las dos combinaciones de polímeros preexistentes. Este proceso se conoce como enredo topológico.
Cuando se expone a la luz ultravioleta (UV), la red de puntos se disuelve, separando los dos materiales. Los investigadores probaron la adhesión y el desprendimiento en una gran variedad de materiales, pegando hidrogeles entre sí; hidrogeles y tejido orgánico; elastómeros; hidrogeles y elastómeros; e hidrogeles y sólidos inorgánicos.
Así, han determinado que esta estrategia "funciona en muchos materiales y puede permitir amplias aplicaciones", según el coautor principal e investigador de la Universidad de Xi'an Jiaotong, Kangling Wu. Si bien los investigadores se enfocaron en usar la luz UV para desencadenar el desprendimiento, su trabajo sugiere la posibilidad de que el polímero de costura pueda desprenderse con luz infrarroja cercana.
"En la naturaleza, a los materiales húmedos no les gusta adherirse", explica Suo. Con este estudio se ha descubierto un "enfoque general para superar este desafío", según el investigador. Ahora, las suturas moleculares pueden adherir fuertemente los materiales húmedos además, se puede hacer permanente, transitoria o desmontable según convenga.