En España hay más de un millón de afectados por esta enfermedad, cuyos principales síntomas son fatiga intensa, dolor, rigidez articular, depresión o ansiedad
MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El paciente con fibromialgia suele generar un gasto aproximado de unos 10.000 euros al año, según se desprende de un estudio en el que han participado un total de 14 centros sanitarios españoles y cuyos resultados se han presentado en el último Congreso de la Liga Europea contra las enfermedades Reumáticas (EULAR, según sus siglas en inglés), que se ha celebrado estos días en Copenhague (Dinamarca).
En dicho estudio han participado un total de 301 pacientes procedentes de los hospitales de Vall d'Hebrón, Clínic y el IMAS (Barcelona); el Hospital 12 Octubre, La Paz, el Gregorio Marañón y la Clínica Clinisas (Madrid); el Hospital General de Asturias (Oviedo); el 9 de Octubre (Valencia); el General de Castellón (Castellón); el Doctor Negrín (Gran Canaria); el General de Guadalajara (Guadalajara) y el Centro Reumatológico Salamanca (Salamanca).
Según estos datos, y teniendo en cuenta que esta patología afecta a más de 1,1 millones de españoles --un 2,4 por ciento de la población-- esta cifra se traduciría en "cerca de 11.000 millones de euros al año en toda España, tanto de gastos directos como indirectos", explicó el jefe de la Unidad de Reumatología del Hospital Universitario Gregorio Marañón (Madrid), Javier Rivera, uno de los autores del estudio.
Un 33 por ciento de los costes son sanitarios, es decir, consultas, tratamientos y pruebas médicas para abordar el dolor, la fatiga intensa, las alteraciones en el sueño, depresión, ansiedad, rigidez articular, cefaleas y otros síntomas que provoca la enfermedad.
El 66 por ciento restante se destina a costes indirectos, derivados de las consecuencias sobre el trabajo. Según este experto, "a diferencia de otras enfermedades, la fibromialgia afecta sobre todo a una población trabajadora" y, de hecho, la edad media del estudio fue 49 años, lo que hace que "dichos gastos indirectos sean mucho mayores".
No obstante, aseguró el doctor Rivera, una gran parte de estos costes se podrían reducir, ya que los elementos más costosos son las terapias no farmacológicas: fisioterapia, acupuntura o masajes, que duplican al que generan las visitas médicas.
En este ámbito, por tanto, se podría reducir el gasto con una buena información hacia los pacientes, ya que de todas estas terapias, sólo unas pocas han demostrado su eficacia --fundamentalmente, el ejercicio físico y la terapia cognitiva conductual, psicológica-- de forma que sólo con éstas se estaría reduciendo una cantidad muy importante del coste sanitario".
VAN AL MÉDICO DE AP TANTO COMO AL ESPECIALISTA
Asimismo, se ha detectado que los pacientes visitan al médico de Atención Primaria el mismo número de veces que al especialista, unas nueve a cada uno al cabo del año, y el especialista supone un gasto seis veces mayor que el médico de primaria, por lo que se dispara el consumo en asistencia especializada.
Además, las pruebas que mayor gasto provocan son las resonancias magnéticas, explicó este experto, cuando "este tipo de prueba no es útil para diagnosticar la enfermedad". En cuanto al tratamiento del paciente, "si se le atendiera bien desde el principio de la enfermedad, se conseguiría reducir las incapacidades y, por tanto, la pérdida de jornadas laborales".
Por último, el autor de esta investigación hizo hincapié en la necesidad de un mayor número de unidades multidisciplinares. Así, destacó que en Cataluña, por ejemplo, se ha establecido por ley que la fibromialgia debe abordarse desde unidades multidisciplinares y se ha creado una en cada área sanitaria.
Las ventajas de estas unidades son que el médico que atiende a los pacientes está altamente especializado en la patología, por lo que prescribe sólo los tratamientos y pruebas necesarios, y que se concentra el mejor tratamiento en un único lugar, "ofreciendo al paciente la mejor opción terapéutica posible y con un enfoque adecuado de los recursos".