Consumir plantas medicinales antes de operarse puede ser "peligroso", según un estudio

Actualizado: lunes, 18 enero 2010 10:10

BARCELONA, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

El consumo de hasta nueve plantas medicinales, entre ellas el ginseng, el ajo y la valeriana, es "peligroso" antes de someterse a una intervención quirúrgica, si bien dicho peligro se centra en la posibilidad de padecer una recuperación postoperatoria más lenta aun que difícilmente ocasionaría la muerte, según un estudio de los servicios de Farmacia y Anestesiología del Hospital Germans Trias y Pujol de Badalona (Barcelona).

En declaraciones a Europa Press, el coordinador del Área de Medicamento del hospital, Xavier Bonafont, explicó que el consumo de kava, ginkgo, 'serenoa repens', hierba de San Juan, efedra y equinácea, además de las tres plantas mencionadas anteriormente, podría prolongar el despertar tras la anestesia.

Entre los posibles efectos adversos se encuentra además la sedación perioperatoria, la dificultad para que las plaquetas taponen posibles hemorragias, la interacción con anticoagulantes orales, el riesgo cardiovascular e incluso reacciones adversas sobre el sistema nervioso central.

Por todo ello Bonafont, junto con la doctora Maite Bosch del Servicio de Farmacia del Germans Trias i Pujol, han elaborado un protocolo informativo para que los pacientes sean avisados de esta particularidad en el momento de realizar la visita al anestesista, unos días antes de ingresar en el quirófano.

El periodo recomendado sin ingerir las plantas varía entre las 24 horas de la kava y la efedra hasta las tres semanas de la 'serenoa repens' y la equinácea. La valeriana, el ajo y el ginseng deberían dejar de tomarse siete días antes de la operación.

EL 11% TOMA PLANTAS MEDICINALES HABITUALMENTE

El estudio elaborado por Bosch y Bonafont incluyó también la realización de una encuesta a más de 200 enfermos antes de operarse, gracias a lo que comprobaron que el 11 por ciento de ellos tomaba plantas medicinales "normalmente". En total, el 1,37 por ciento había consumido alguna de las nueve plantas contraindicadas en un periodo de tiempo inferior al recomendado para evitar posibles complicaciones.

Bonafont relató que, en ocasiones, los anestesiólogos les habían comentado que había personas concretas que tardaban más tiempo del habitual en recuperarse, lo que podría ser causado por la ingesta de plantas medicinales. Este hecho, junto con la elaboración de estudios similares en Estados Unidos, motivó la actuación de los especialistas del hospital de Badalona.