MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación publicada en 'Diabetologia' muestra que los consumidores actuales y anteriores de marihuana son más propensos a tener prediabetes -niveles de azúcar en sangre más elevados de lo normal que pueden progresar a diabetes tipo 2-- que los que no fuman marihuana. Sin embargo, los investigadores, dirigidos por Mike Bancks, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Minnesota, en Minneapolis, Estados Unidos, no lograron establecer una relación directa entre el consumo de marihuana y la diabetes tipo 2.
MARIHUANA
La marihuana es la droga ilegal de uso más frecuente en Estados Unidos y se cree que también a nivel mundial, con un estimado de 18,9 millones de personas de 12 años o más en Estados Unidos identificadas como consumidores en 2012. La prevalencia de consumo de marihuana en estos individuos se ha incrementado desde el año 2002, una tendencia que se espera que continúe a medida que los estados de Estados Unidos aprueben políticas que permitan su uso medicinal o recreativo.
A pesar del creciente movimiento para legalizar la marihuana, se sabe poco sobre su efecto en la salud metabólica. Estudios previos sobre esta cuestión han revelado resultados contradictorios, sugiriendo que un poco de marihuana puede reducir el riesgo de diabetes, a pesar de otras investigaciones muestran que la droga se asocia con un mayor consumo de calorías.
En este nuevo estudio, los autores investigaron la asociación entre el consumo de marihuana declarado por los propios consumidores y prediabetes y diabetes tipo 2 a gran escala, teniendo en cuenta tanto la cantidad consumida como el consumo actual. También examinó el papel del índice de masa corporal (IMC) y la circunferencia de la cintura como factores de confusión potenciales y/o factores que median en estas asociaciones, además de analizar los efectos de sexo y raza en las vinculaciones.
Se emplearon datos del estudio 'Coronary Artery Risk Development in Young Adults (CARDIA)' para determinar el consumo de marihuana y la presencia de prediabetes y diabetes. Las personas en el estudio CARDIA tenían entre 18 y 30 años de edad en el momento de reclutamiento para el estudio entre 1985 y 1986 y actualmente están en su año 30 de observación.
La asociación entre el consumo de marihuana y la prevalencia de prediabetes y la diabetes se examinó en 3.034 participantes en el año 25 de seguimiento del estudio CARDIA (2010-2011) y la incidencia de la prediabetes y la diabetes en relación con el consumo de marihuana anterior se evaluó en 3.151 individuos libres de la prediabetes y diabetes en el año 7 (1992-1993) que volvieron para al menos uno de los cuatro exámenes de seguimiento posteriores en los siguientes 18 años.
El porcentaje de personas que dijeron consumir marihuana disminuyó durante el seguimiento, del 28 por ciento en 1985-1986 al 12 por ciento en 2010-2011. Tras ajustar por características de comportamiento/estilo de vida y fisiológicas, hubo un 65 por ciento más de probabilidades de tener prediabetes en las personas que dijeron consumir marihuana actualmente y un 49 por ciento más de probabilidades de presentar prediabetes en los individuos que dijeron haber consumido marihuana durante cien veces o más frente a sujetos que nunca habían probado la marihuana.
Sin embargo, no hubo asociación entre el uso de marihuana y la diabetes tipo 2 a gran escala en CARDIA en el análisis del año 25. En el caso de estos resultados, los científicos no distinguen qué fue primero, el consumo de marihuana o la prediabetes y no fue posible tener en cuenta si las personas optan por modificar su consumo de marihuana al preocuparse por su estado de salud.
Entonces, los autores hicieron más análisis en los que el consumo de marihuana se evaluó antes del desarrollo o no de la prediabetes. Durante más de 18 años de seguimiento, se vio un 40 por ciento más de riesgo de desarrollar prediabetes (pero no para la diabetes) en las personas que dijeron haber consumido marihuana cien veces o más en comparación con los individuos que nunca fumaron marihuana. El IMC y la circunferencia de la cintura no afectaron a estas relaciones.
"No está claro cómo el consumo de marihuana podría poner a una persona en mayor riesgo prediabetes pero no de diabetes", dicen los autores, quienes sugieren que podría deberse a que las personas excluidas del estudio (debido a la falta de información sobre factores importantes) por lo general presentaban niveles más altos de consumo de marihuana y un mayor potencial para el desarrollo de la diabetes, o que la marihuana puede tener un mayor efecto en el control de azúcar en sangre en el rango prediabético que para la diabetes tipo 2 en toda regla, cuando otros niveles de factores de riesgo de diabetes tradicionales son extremadamente menos favorables.
Los autores concluyen: "El consumo de marihuana, según el estado o la frecuencia durante toda la vida, no se asoció con la incidencia o la presencia de diabetes después de ajustar por posibles factores de confusión. Sin embargo, el consumo de marihuana se relacionó con el desarrollo y la prevalencia de prediabetes después de ese ajuste. En concreto, la aparición de la prediabetes en la edad adulta media fue significativamente elevado para las personas que dijeron consumir marihuana más de cien veces en la edad adulta. Estos resultados contrastan con los obtenidos previamente sobre el consumo de marihuana y la salud metabólica. Estudios futuros deben intentar medir objetivamente el modo y la cantidad de consumo de marihuana en relación con la salud metabólica prospectiva".