MADRID 26 May. (EUROPA PRESS) -
Las consultas a asistentes conversacionales basados en Inteligencia Artificial ('chatbots') sin supervisión en personas vulnerables pueden conllevar riesgos en la salud mental, según una revisión de estudios realizada por Itersia - Centro de Psicoterapia.
La psicóloga Elisabet Sánchez señala que "cambiar el 'chatbot' por el terapeuta puede provocar desde omisión de crisis clínicas hasta dependencia emocional sin respaldo real", como ocurrió con el suicidio de un adolescente estadounidense que se enamoró de su asistente conversacional. "Estos sistemas pueden complementar, pero no reemplazar, la supervisión clínica humana en intervenciones de salud mental", añade.
Los estudios revelan un aumento de consultas con relación al estrés, ansiedad, depresión y trastornos de la conducta alimentaria. La accesibilidad, la disponibilidad 24 horas, y la capacidad de simular conversaciones empáticas les permite a los 'chatbots' complementar, e incluso en ciertos contextos, suplir parcialmente la atención psicológica humana, sobre todo en zonas rurales donde es más complicado acceder a un profesional. "La necesidad de inmediatez de la sociedad se ha trasladado a la consulta psicológica a los asistentes conversacionales", señala Sánchez.
Un estudio reciente publicado en 'JMIR Mental health' indica que los modelos de IA generativa demuestran fortalezas en psicoeducación y conciencia emocional, pero su precisión diagnóstica, competencia cultural y capacidad para involucrar emocionalmente a los usuarios siguen siendo limitadas.
Otro trabajo publicado este año, resalta que los 'chatbots' no están sometidos a un control de ética, lo que puede generar graves problemas.
Además, otra investigación reciente con pacientes que padecen ansiedad social encontró que quienes presentaban síntomas más graves tendían a confiar más en los 'chatbots', viéndolos como un sustituto emocionalmente seguro a la interacción humana. Esto puede reforzar patrones de evitación social y reducir la motivación para buscar ayuda profesional real. El estudio, en este aspecto, subraya la necesidad de establecer límites claros sobre el papel de los 'chatbots' como herramientas de apoyo, no de reemplazo.
Los principales riesgos que plantea esta tendencia son: la falta de detección de crisis y urgencias psicológicas; la falsa percepción de relación terapéutica; los consejos inadecuados o erróneos; la falta de adaptación a contextos clínicos complejos; y la ausencia de supervisión.
Por último, las recomendaciones que ofrecen los expertos son: una supervisión profesional constante; utilizarlo como herramienta educativa o de seguimiento para reforzar hábitos; y una evaluación continua de calidad para evitar que promuevan desinformación.
