MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
Tres de cada cuatro españoles duermen peor en la época de verano, ya que las altas temperaturas y el mayor número de horas de luz alteran los ritmos circadianos del organismo, según una encuesta realizada por el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO). Por ello, el jefe de la unidad de sueño del Hospital Vithas Nuestra Señora de América y somnólogo acreditado por la European Sleep Research Society (ESRS), doctor Rafael Del Río e INFITO, proporcionan una serie de consejos para conseguir dormir bien en esta estación.
Las altas temperaturas juegan un papel fundamental a la hora de conciliar y mantener el sueño. Durante la noche, el organismo no ejerce el mismo control sobre la temperatura corporal, "que desciende para facilitar la conciliación, por lo que una situación extrema, tanto de mucho calor como de mucho frío, puede afectar bastante causando muchos despertares y empeorando su calidad", según ha explicado del Río.
Las condiciones ideales para dormir son unas temperaturas de entre 18 y 22 grados y una humedad de entre el 50 y el 70 por ciento, ha explicado el doctor.
DECÁLOGO PARA CONCILIAR EL SUEÑO EN VERANO
1. Abundante hidratación: hay que beber al menos un litro y medio de agua al día.
2. Cuidado con las bebidas estimulantes: la cafeína o la ingesta de alcohol antes de dormir no es aconsejable porque activa el organismo e interrumpe el sueño.
3. Cenas ligeras: evitar ingerir grandes cantidades de comida antes de acostarse porque puede crear problemas digestivos y dificultades para dormir.
4. No alterar los horarios de las comidas: un ritual basado en una secuencia de actos conducirá a una buena conciliación del sueño, como puede ser el dejar pasar un mínimo de dos horas desde la cena para irse a la cama o mantener siempre el mismo horario para acostarse, ha asegurado el doctor Del Río.
5. Reducir o restringir la siesta: es importante eliminar la siesta o que esta no supere los treinta minutos, y reducir el tiempo en el que permanecemos despiertos en la cama por las noches. El experto recomienda no superar las siete horas y media, especialmente si se tiende a pasar periodos despiertos.
6. Limitar el uso del aire acondicionado: ventilando las habitaciones pero sin dejar las ventanas abiertas en las horas de más sol.
Según el especialista, el aire acondicionado puede provocar problemas de garganta, resfriados o contracturas musculares. Además el ruido que emiten estos aparatos pueden generar una fragmentación del sueño al causar diversos despertares. "Lo ideal es recurrir a él solo antes de acostarse para conseguir un ambiente fresco que pueda perdurar durante las primeras horas de la noche, que suelen ser las más calurosas", ha explicado el doctor.
7. Darse una ducha fría antes de dormir para combatir el calor.
8. Usar pijamas de algodón para evitar la sudoración excesiva.
9. Usar técnicas de relajación: como baños, ejercicios de meditación o de respiración pausada.
10. Plantas medicinales de dispensación farmacéutica: como la pasiflora que evita los despertares nocturnos y favorece el sueño reparador o la amapola de California, que reduce el nerviosismo asociado al insomnio.
Los preparados farmacéuticos de plantas medicinales "pueden ayudar a corregir el insomnio pasajero como el que se produce en verano en vez de recurrir a los somníferos de origen sintético, ya que van a permitir mejorar la calidad del sueño sin generar dependencia", ha explicado el miembro de la junta directiva de INFITO, Miguel Martín Almendros.
Según ha apuntado Martín Almendros, hay que tener cuidado con los somníferos de síntesis, ya que pueden causar efectos secundarios a corto plazo, como la adicción o la tolerancia, y puede generar problemas de dependencia a medio o largo plazo.