MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las caídas en personas mayores de 60 años pueden prevenirse con programas de ejercicios, ha concluido una Revisión Cochrane realizada por un equipo compuesto por investigadores de la Universidad de Sidney (Australia) y la Universidad de Oxford (Reino Unido).
La revisión incluyó 108 ensayos controlados aleatorios con 23.407 participantes, tres cuartos de ellos mujeres, de 25 países distintos con una edad media de 76 años.
Un total de 81 de estos ensayos compararon ejercicio de todo tipo con la intervención de control, es decir, no hacer ejercicio o hacer un ejercicio mínimo suave que no reduce las caídas, en personas que viven de forma independiente, en un complejo residencial para jubilados o en viviendas protegidas.
Se examinaron dos formas diferentes de medir las caídas. En primer lugar, hallaron que el ejercicio reduce a lo largo del tiempo el número de caídas en un 23 por ciento, lo que significa que de 850 caídas en 1.000 personas mayores que no realizaron ejercicios de prevención de caídas durante un año, habría 195 caídas menos entre las personas que realizaron ejercicios de prevención de caídas.
También encontraron que el ejercicio reduce el número de personas que tienen una o más caídas en un 15 por ciento. Por ejemplo, si 480 caídas de cada 1.000 personas experimentaron uno o más caídas en un año, participar en programas de ejercicio reduciría la cantidad de personas que caen en 72 personas.
La revisión encontró efectivos los programas de ejercicios realizados en clases grupales o en casa, prescrito por un profesional de la salud, como un fisioterapeuta, o entrenador físico. La mayoría de los ejercicios se realizaron de pie, ya que esto mejora el equilibrio y la capacidad para realizar actividades diarias como levantarse de una silla baja o subir escaleras. Algunos programas también usaron pesas para hacer los ejercicios más difíciles.
DIVERSOS TIPOS DE EJERCICIOS
Los resultados variaron, así que los investigadores evaluaron diferentes tipos de programas de ejercicio para ver cómo se comparaban.
En este contexto, de la revisión se desprende que existe una evidencia de certeza alta de que los programas que involucran principalmente ejercicios de equilibrio y ejercicios funcionales reducen las caídas.
Mientras, hubo menos certeza acerca de los programas que incluyen múltiples categorías de ejercicios con más frecuencia, principalmente ejercicios de equilibrio y ejercicios funcionales además de ejercicios de resistencia.
El taichí también puede prevenir las caídas, pero existe evidencia incierta sobre la efectividad de los ejercicios de resistencia, sin ejercicios de equilibrio ni ejercicios funcionales, como bailar o caminar.
Además, la evidencia del efecto global del ejercicio sobre la prevención de caídas fue alta. Sin embargo, los hallazgos de que el ejercicio reduce las fracturas y la necesidad de atención médica son menos seguros, lo que refleja, en parte, el número relativamente pequeño de estudios y participantes para esos resultados.
"Esta evidencia ayuda a construir una imagen aún más sólida de que el ejercicio puede ayudar a prevenir que las personas mayores se caigan. También ilustra qué tipos de ejercicio pueden ser beneficiosos", ha indicado la prfesora de la Universidad de Sidney, Cathie Sherrington.
"Es bien sabido que mantenerse activo promueve la buena salud, pero esta revisión señala qué tipos de ejercicio tienen más probabilidades de ser eficaces para prevenir las caídas", ha agregado la experta.
EFECTOS SECUNDARIOS NO GRAVES
Cuando se informaron de efectos secundarios, que constaba de una evidencia limitada, éstos por lo general no era graves. Dolor en las articulaciones o en los músculos eran los usuales, aunque un ensayo informó de una fractura por estrés pélvico.
Pero "se necesitan más estudios para establecer la repercusión del ejercicio en las fracturas relacionadas con las caídas y las caídas que requieren atención médica porque tienen un impacto importante para el individuo y son particularmente costosos para los sistemas de salud", ha reconocido Sherrington.
Además, se requiere investigación adicional "para establecer la efectividad de los programas de prevención de caídas en economías emergentes donde la carga de las caídas está aumentando más rápidamente que en los países desarrollados debido al rápido envejecimiento de la población", ha concluido la experta.