MÉRIDA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
La comunidad autónoma de Extremadura ha registrado el pasado domingo, día 25, el primer fallecimiento de un paciente por gripe esta temporada. En concreto ha sido una mujer de 77 años que se encontraba ingresada en un hospital de Cáceres y tenía factores de riesgo cardiovascular.
La tasa de incidencia semanal de la gripe en Extremadura alcanzó la pasada semana los 499 casos por cada 100.000 habitantes, casi el doble de la tasa registrada durante la semana anterior (267 casos/100.000), según los datos recogidos por el Sistema Centinela de Vigilancia de esta enfermedad en la región.
Hasta el momento han contraído la gripe esta temporada algo más de 16.000 personas, según las estimaciones recogidas en el informe semanal de la Subdirección de Epidemiología del Servicio Extremeño de Salud, que señala que la enfermedad tiene "difusión epidémica y tendencia creciente".
El citado informe se elabora a partir de la información proporcionada por los 31 médicos generales y pediatras de Atención Primaria de toda la región incluidos este año en el Sistema Centinela de Vigilancia de la Gripe, que atienden a unos 31.000 habitantes, casi el 3 por ciento de la población extremeña, según ha informado el Gobierno de Extremadura en nota de prensa.
19 CASOS GRAVES Y UN FALLECIMIENTO
Hasta el pasado domingo 25 de enero, los hospitales extremeños habían notificado 19 casos graves hospitalizados con gripe, la mayor parte de ellos en los dos hospitales de Cáceres (14), tres en Badajoz y dos en Plasencia.
El pasado domingo se registró el primer fallecimiento de un paciente con gripe durante esta temporada en la región. Se trata de una mujer de 77 años que se encontraba ingresada en un hospital de Cáceres y tenía factores de riesgo cardiovascular.
En el conjunto de España, hasta la fecha se han notificado 331 casos graves hospitalizados en todas las comunidades autónomas españolas, y se han producido 36 defunciones asociadas a la gripe en nueve regiones diferentes.
De los 18 casos graves que permanecen hospitalizados en Extremadura, cinco de ellos han precisado atención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), mientras que los restantes están siendo atendidos en planta.
Todos ellos tenían uno o varios factores de riesgo asociados a la gripe como enfermedad cardiovascular crónica (seis), enfermedad pulmonar crónica (cinco), diabetes (cinco), enfermedad renal (dos), hepática (dos), obesidad (uno) o inmunodeficiencia (uno).
El motivo del ingreso de estos pacientes han sido las diversas complicaciones que presentaban asociadas a la gripe, como neumonía (nueve casos), insuficiencia respiratoria (siete), co-infección -una segunda infección además de la gripe-- (cinco), y fallo multiorgánico (cinco).
Al menos diez de estos usuarios no se habían vacunado contra el virus de la gripe (52,6 por ciento), mientras que ocho sí lo habían hecho y en un caso no consta.
Por tramos de edad, el grupo más afectado es el de personas con más de 80 años (ocho casos), seguido del de 50 a 59 años (cinco), los de 60 a 69, y 70 a 79 años (dos casos en cada uno de ellos), y los de 0 a 10 y 10 a 20 años (un caso en cada grupo).
Aunque la campaña oficial de vacunación concluyó a finales de noviembre, todavía hay dosis disponibles en los centros de Atención Primaria, donde pueden vacunarse todas las personas mayores de 60 años, los usuarios de cualquier edad con enfermedades crónicas cardiovasculares, pulmonares, hepáticas o neurológicas, obesidad, insuficiencia renal disfunción cognitiva u otras patologías o situaciones consideradas como factores de riesgo.
También está indicada la vacunación para personas que pueden transmitir la gripe a otras con alto riesgo de complicaciones, como los trabajadores de centros sanitarios o instituciones geriátricas, y profesionales de servicios públicos esenciales como fuerzas de seguridad, emergencias sanitarias o personal docente.
El SES recuerda a los usuarios que en caso de que tengan síntomas de la gripe deben acudir a consulta con su médico de cabecera en el centro de salud o consultorio que les corresponda, para evitar colapsar los servicios de urgencias.