ALBACETE, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El grupo de Virología Molecular del Centro Regional de Investigaciones Biomédicas (CRIB) de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en el campus biosanitario de Albacete ha realizado un estudio publicado recientemente en la revista internacional Journal of General Virology, en donde da a conocer los resultados de las investigaciones relacionadas con el virus de la hepatitis C y que abren una nueva vía en la exploración de tratamientos para esta enfermedad.
Según ha explicado el profesor de la Facultad de Farmacia en Albacete, Antonio Mas, el virus de la hepatitis C infecta células hepáticas y tiene como genoma una molécula de ARN. Este virus es la principal causa de hepatocarcinoma y en la actualidad infecta a casi doscientos millones de personas en el mundo.
Según ha informado la Universidad en nota de prensa, la principal vía de infección es la transmisión parenteral: transfusiones (aunque hoy en día este riesgo está en mínimos con los métodos de detección), drogadicción, etc., con un porcentaje más bien bajo de infecciones sin causa de transmisión reconocida.
Para entender la importancia del hallazgo, el director del grupo aclara que los virus producen descendencia replicando (copiando) su genoma y generando copias hijas. Para hacerlo se necesitan complejos de replicación, factorías donde se encuentran las proteínas del virus y proteínas de la célula infectada que trabajan coordinadas para dar lugar a los genomas de la descendencia.
La principal proteína implicada en la replicación viral del virus de la hepatitis c es la ARN-polimerasa, una enzima que sintetiza las copias de ARN genomas hijas.
COLLAR DE PERLAS
El nuevo avance científico determina que la ARN-polimerasa puede formar complejos consigo misma, dando lugar a oligómeros, cadenas de polimerasas que podrían compararse con las cuentas de un collar de perlas. Además, los investigadores de la UCLM han descubierto que la formación de estos complejos es imprescindible para que esta polimerasa interaccione con una proteína celular necesaria en la replicación, el receptor de estrógenos.
El objetivo es, por tanto, impedir la formación de los oligómeros para evitar así que la interacción entre la proteína viral (ARN-polimerasa) y el receptor de estrógenos tenga lugar
En este sentido, Antonio Mas señala que los tratamientos que existen en la actualidad (en uso o en desarrollo) están dirigidos a bloquear la actividad de las proteínas virales mientras que los investigadores del CRIB proponen la interacción entre proteínas y no su actividad intrínseca, como una diana para el desarrollo de nuevas terapias.