MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad Wake Forest (Estados Unidos) han descubierto un posible nuevo enfoque en el tratamiento de los tumores sólidos mediante la creación de una novedosa nanopartícula.
En el estudio, publicado en la revista científica 'Science Translational Medicine', los investigadores utilizaron una nanopartícula para administrar una pequeña molécula denominada ARL67156 con el fin de promover una respuesta inmunitaria antitumoral en modelos de ratón de cáncer de colon, cabeza y cuello, y de mama metastásico, lo que se tradujo en una mayor supervivencia.
La inmunoterapia ha transformado el tratamiento del cáncer, pero, por desgracia, sólo un 20 por ciento de los pacientes responde al tratamiento. "La mayoría de los tumores sólidos tienen un microambiente pobre que puede hacer que no respondan a los tratamientos convencionales contra el cáncer, incluida la inmunoterapia. Pero este estudio demuestra que la terapéutica con nanopartículas es prometedora", explica el líder del trabajo, Xin Ming.
Según el investigador, los niveles de trifosfato de adenosina (ATP), una molécula portadora de energía, son elevados en los tumores tratados con terapias anticancerosas y se degradan rápidamente en adenosina por una serie de enzimas muy expresadas en los tumores.
La presencia de adenosina en los microambientes tumorales puede contribuir a una mala respuesta terapéutica. Los compuestos como el ARL67156 son incapaces de entrar en los tumores sólidos por sí solos debido a sus pobres propiedades fisicoquímicas. Sin embargo, el diseño de la nanopartícula sí permite la acumulación y liberación de ARL67156 de forma selectiva en los tumores sólidos.
En el estudio, los científicos utilizaron la nanopartícula como vehículo para administrar ARL67156, un inhibidor enzimático que impide la degradación del ATP en adenosina. La nanopartícula se probó en varios modelos tumorales de ratón. "Descubrimos que la nanomedicina suprimía sustancialmente el crecimiento del tumor y prolongaba la supervivencia", detalla Ming.
A continuación, los investigadores probaron cómo funcionaba la nanopartícula en combinación con un anticuerpo anti-PD-1, una inmunoterapia habitual. Los investigadores observaron que el tratamiento funcionaba bien y de forma sinérgica con la terapia anti-PD-1.
Por último, los científicos evaluaron la nanomedicina en un modelo tridimensional in vitro de tumores de pacientes con cáncer de colon o de mama. Se observaron efectos similares: aumento de la muerte de las células tumorales gracias a la respuesta inmunitaria contra el cáncer.
"Nuestro estudio sugiere que nuestra nanopartícula terapéutica tiene potencial para el tratamiento de los cánceres humanos y que también podría potenciar la eficacia de los tratamientos existentes. Estos resultados justifican una mayor evaluación", concluye Ming.