MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El contacto inmediato piel con piel entre los recién nacidos y sus madres ofrece un mejor comienzo en la vida, mejorando una serie de indicadores de salud clave, según una revisión 'Cochrane' de la Universidad de Vanderbilt (Estados Unidos) recientemente actualizada.
La revisión reveló que los bebés que tienen contacto piel con piel con su madre durante la primera hora de vida tienen mayor probabilidad de experimentar diversos beneficios, como la lactancia materna exclusiva, temperaturas corporales y niveles de glucosa en sangre óptimos. Si bien también se estudiaron posibles beneficios para la madre, como los efectos sobre la pérdida de sangre y el momento de la expulsión de la placenta, la evidencia fue menos concluyente.
El contacto piel con piel consiste en colocar al recién nacido desnudo sobre el pecho descubierto de la madre inmediatamente después del nacimiento. Esta sencilla práctica ayuda a los bebés a adaptarse a la vida extrauterina, manteniéndolos calientes, reduciendo el estrés y el llanto, y favoreciendo funciones vitales como la respiración y la frecuencia cardíaca.
La evidencia a favor del contacto piel con piel inmediato es tal que los autores ahora desaconsejan realizar más ensayos aleatorios en los que no se ofrezca contacto piel con piel en el grupo de control.
Esta revisión se basa en una actualización de 2016 que sirvió de base para 20 directrices internacionales, incluyendo una recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La última actualización añade 26 estudios nuevos, lo que eleva el total a 69 ensayos con más de 7.000 pares madre-hijo, la mayoría realizados en países de altos ingresos.
TIENEN MAYOR PROBABILIDAD DE AMAMANTARLOS
Los resultados muestran que las madres que tienen contacto piel con piel con sus bebés durante la primera hora tras el parto tienen mayor probabilidad de amamantarlos exclusivamente durante los primeros seis meses de vida. La lactancia materna exclusiva aporta numerosos beneficios para la salud de las madres, los bebés y los sistemas de salud.
La revisión reveló que aproximadamente el 75% de los bebés que recibieron contacto piel con piel temprano se alimentaban exclusivamente de leche materna al mes, en comparación con el 55% de los bebés de los grupos que no recibieron contacto piel con piel. Los recién nacidos también se benefician de niveles óptimos de azúcar, temperatura corporal, respiración y frecuencia cardíaca.
A pesar de las recomendaciones de iniciar un contacto piel con piel inmediato e ininterrumpido hasta después de la primera lactancia, muchos sistemas de salud todavía separan a las madres de sus bebés durante este período.
"Históricamente, los bebés han sido separados de sus madres inmediatamente después del nacimiento para procedimientos rutinarios como el examen físico, el pesaje y el baño, lo que impide el contacto piel con piel inmediato", desarrolla la autora principal, Elizabeth Moore, jubilada de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Vanderbilt. "Incluso en países con una atención de alta calidad, esta intervención gratuita y de fácil implementación no es una práctica común".
Es importante destacar que la revisión destaca que ya no es ético realizar más ensayos controlados aleatorios que comparen el contacto piel con piel con la "atención habitual".
Los hallazgos muestran que ahora existe suficiente evidencia para convertir el contacto piel con piel inmediato después del nacimiento en el estándar de atención global. Dado que la OMS ya recomienda el contacto piel con piel como estándar de atención, los autores argumentan que la aleatorización a la separación de la madre y el recién nacido podría ya no justificarse.
"Retener el contacto piel con piel ahora se consideraría poco ético, ya que existe suficiente evidencia que demuestra que esta práctica mejora la salud y la supervivencia de los recién nacidos", asegura Karin Cadwell, autora principal, directora ejecutiva y profesora principal del Centro de Lactancia Materna del Proyecto Niños Saludables.
"Si bien los estudios elegibles para nuestra revisión no se centraron en la supervivencia, otras investigaciones en entornos de bajos recursos han demostrado que el contacto piel con piel puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte en bebés con bajo peso al nacer. El reclutamiento para un ensayo a gran escala en hospitales de la India y África se detuvo después de que datos preliminares mostraran que el contacto piel con piel mejoraba significativamente la supervivencia ".
Si bien los estudios incluidos en esta revisión provienen de países de ingresos altos y medios de varios continentes, ninguno se realizó en países de bajos ingresos. Los autores señalan que las investigaciones futuras deberían priorizar la mejora de la calidad de los estudios y centrarse en la implementación, en lugar de en la evaluación de la intervención en sí.