PEKÍN 3 Mar. (EUROPA PRESS/Débora Altit) -
El Gobierno chino ha dado la orden a los médicos chinos de que dejen de fumar, para dar ejemplo al resto de la población y acabar con un vicio que consume 350 millones de chinos y causa la muerte de un millón cada año.
"Los médicos y aquellos que toman decisiones relacionadas con la salud de la población deberían llevar la iniciativa y dejar de fumar, y prohibir completamente el fumar en lugares cerrados para dar buen ejemplo a sus pacientes y a otros que los admiran", ha manifestado el ministro de Salud chino, Chen Zhu, según declaraciones recogidas hoy por el periódico oficial 'China Daily'.
"La experiencia internacional demuestra que cuando los médicos dejan de fumar animan a muchos otros a abandonar el hábito", agregó el ministro. El 57% de los médicos varones fuma, el mayor porcentaje del mundo de acuerdo con el periódico, que no indica cuál es la prevalencia del hábito entre las féminas.
Aunque China puso en marcha una serie de medidas y prohibiciones el año pasado, con motivo de la celebración de los Juegos Olímpicos, el respeto a muchas de las normas se ha relajado ante la imposibilidad de controlar su aplicación.
El bajo coste del tabaco en el país, donde se puede adquirir una cajetilla por unos céntimos de euros, tampoco facilita el abandono del hábito.
De momento, la Asociación de Medicina Preventiva China ha puesto en marcha entre el personal médico esta campaña, a la que se han unido una veintena de asociaciones del sector y universidades.
Algunos hospitales, como el Chaoyang de Pekín, han recurrido a ofrecer "bonos anti-tabaco" a los empleados que no fumen, en una iniciativa que está cosechando un gran éxito.