MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La inflamación de la artritis reumatoide se dirige también al cerebro y no sólo a las articulaciones, según ha mostrado una investigación llevada a cabo por científicos del Centro de Investigación del Dolor Crónico y la Fatiga de la Medicina de Michigan (Estados Unidos) y que ha sido publicado en a revista 'Nature Communications'.
La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria y autoinmune con niveles importantes de inflamación que pueden afectar las articulaciones de una persona y el resto de su cuerpo, inducir fatiga, dormir y crear dificultades cognitivas.
En el trabajo, los expertos utilizaron datos de 54 pacientes con artritis reumatoide cuidadosamente medidos y caracterizados por el autor del estudio y doctor Universidad de Aberdeen en el Reino Unido, Neil Basu. Utilizando neuroimágenes funcionales y estructurales del conjunto de datos al inicio y durante seis meses, se examinó si los niveles más altos de inflamación periférica se asociaron con la conectividad y la estructura del cerebro.
"Tomamos los niveles de inflamación en su sangre periférica, tal como lo haría clínicamente un reumatólogo para controlar la gravedad de su enfermedad y encontramos resultados consistentes en un par de áreas del cerebro que se conectaban a varias redes cerebrales. Seis meses después volvimos a mirar y observamos patrones similares, si bien esta replicación de los resultados no es tan común en los estudios de neuroimágenes", han explicado los expertos.
Una vez hallado este dato, Chelsea Kaplan, un investigador de anestesiología en Michigan Medicine, examinó la conectividad funcional de 264 regiones del cerebro, detectando un aumento en los patrones de conectividad en los pacientes que experimentan niveles elevados de inflamación.
"Todo esto nos ha mostrado que el cerebro no funciona de forma aislada y que la inflamación que observamos e la periferia puede estar alterando conexiones funcionales del cerebro y desempeñando un papel en algunos de los síntomas cognitivos que se producen en la artritis reumatoide", han recalcado.
Por ello, los expertos consideran que el futuro objetivo de las vías inflamatorias centrales puede mejorar en gran medida la calidad de vida de los pacientes con artritis reumatoide y potencialmente otros trastornos inflamatorios crónicos".
Debido a que este es uno de los primeros estudios para examinar la inflamación cerebral en la artritis reumatoide, dice Schrepf, se necesita investigación adicional sobre la correlación.
Basu está de acuerdo, "una mayor exploración en este complejo espacio exige un sólido trabajo multidisciplinario y colaborativo, y este estudio representa un buen ejemplo de la ciencia del equipo transatlántico".