BARCELONA, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Salud de la Generalitat de Cataluña rebajó hoy a siete el número de infectados por el virus de la hepatitis C en Tarragona al someterse a sesiones de diálisis en un centro concertado de la localidad, y precisó que los Servicios Territoriales de Salud en Tarragona ya tuvieron conocimiento del brote el 1 de diciembre de 2009.
En un comunicado, Salud precisó que se está "a la espera" de los resultados de un estudio molecular y filogenético, que permitirá conocer el origen del virus, y que se encargó después de tener conocimiento de los hechos.
La Dirección General de Recursos Sanitarios emitió un primer informe en el que se identificaron una serie de puntos que se podían mejorar en el procedimiento del centro tarraconense, tras lo que se aplicaron una serie de medidas cautelares y correctivas.
La Asociación El Defensor del Paciente avanzó hoy que más de una decena de pacientes renales resultaron infectados durante las sesiones de diálisis en el Instituto Nefrológico Santa Tecla de Tarragona, extremo que confirmaron a Europa Press fuentes del centro.
Los hechos se remontan al 3 de diciembre de 2009, cuando representantes del centro reunieron a varios pacientes infectados con el virus en distintas horas, y se les comunicó la negligencia.
Según el relato de los pacientes, que confirmó el centro, dada la elevada edad de algunos de los pacientes se les tranquilizó diciéndoles que no debían preocuparse, puesto que la enfermedad no se desarrolla hasta pasados 20 años.
También se informó de la necesidad de tomar precauciones con los familiares para evitar posibles contagios a través de heridas, hemorragias, útiles de limpieza y aseo personal, como maquinillas de afeitar, toallas y ropa interior.
Tras los hechos, uno de los pacientes, que llevaba cuatro años y medio en lista de espera para recibir un trasplante, fue trasladado de urgencia para realizar la intervención, pero tuvo que remitir al especialista al centro de diálisis para que le explicara que no podía aceptar el riñón debido a una infección por hepatitis C.
El Defensor del Paciente pidió al fiscal jefe de Tarragona, Javier Jou, una investigación de oficio que determine la cantidad de pacientes afectados, la forma del contagio y depuración de responsabilidades.