Cataluña.- PSC, CiU y PP rechazan una ILP contra transgénicos que sí apoyaban ERC e ICV-EUiA

Actualizado: jueves, 2 julio 2009 14:10

BARCELONA 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

PSC, CiU y PP unieron hoy sus fuerzas para rechazar la tramitación de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para la prohibición del cultivo de transgénicos, que sí tenía el apoyo de ERC, ICV-EUiA y Grupo Mixto, y que recogió 105.896 firmas, validándose 69.043.

El texto se enfrentaba a enmiendas a la totalidad de PSC, CiU y PP, que se votaron de forma secreta a petición de ERC e ICV-EUiA. Alertaba de los posibles riesgos sanitarios y ambientales de este tipo de productos, y que se declarara Cataluña territorio libre de transgénicos. La propuesta también pedía identificar los productos en las etiquetas, e investigar los efectos para la salud de los organismos, además de establecer sanciones para los infractores. Las enmiendas fueron aprobadas por 95 votos a favor, 35 en contra y una abstención.

Alexis Anglada, miembro de la Plataforma Som lo que Sembrem, pidió a los diputados que permitan el debate sereno y tranquilo de la iniciativa, como en muchos países de Europa. Lamentó que los activistas hayan sido calificados de antisistema y radicales, y se sorprendió de la gran presencia policial en el Parlament. "De antisistema nada. Hemos utilizado las reglas del juego que ustedes nos han dado", señaló.

Aprovechó para acusar al Govern de dejarse llevar por intereses económicos. "Parece que en lugar de gobernar para el pueblo lo hagan para gobernar las empresas", dijo. Inglada aseguró que se han sentido agredidos, engañados y manipulados, y que se han segado oportunidades para muchas familias campesinas.

También reprochó al Govern que no obligue a especificar el origen de los productos en las etiquetas: "¿Qué daño hace esta información? Piensen como representantes del pueblo, no se pongan en la piel de marcas comerciales o empresas de biotecnología".

Josep Grau (CiU) defendió su enmienda de retorno apuntando que se basan en el rigor técnico, jurídico y científico, y que no existe ningún estudio contrastado que diga que los transgénicos son peligrosos. A su vez, Joan Bertomeu (PP) argumentó que no se puede limitar la libertad de los campesinos, y alegó que existe legislación europea que permite el uso de transgénicos, y que ningún estudio ha certificado que son perjudiciales para la salud, sino lo contrario.

La diputada del PSC Caterina Mieras indicó que la prohibición que propone la iniciativa "no deja de ser un intento de poner límites a la expansión científica del conocimiento y su aplicación práctica". Vio lógico que exista controversia, pero pidió un debate sin demagogia o parcialidad, sino realista, objetivo y con rigor.

En cambio, el diputado de ERC Carmel Mòdol indicó que el Parlament "no puede dar la espalda a este debate que ya forma parte de la sociedad", al margen de la posición que cada uno tenga sobre los transgénicos. De hecho, dijo que la peor manera de conducir un debate es precisamente no escuchando a las partes.

Francesc Pané (ICV- EUiA) argumentó que los diputados han sido escogidos para debatir sobre lo que es difícil y controvertido: "Ligar nuestra responsabilidad a demandas populares es vincular la democracia representativa a su gente".

Se mostró en contra de los transgénicos, y dijo que es factible que Cataluña acabe prescindiendo de unos productos que "quizá no son las semillas del diablo, pero son diabólicas".