MADRID 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Casi un tercio de las personas con asma grave afirman que la enfermedad les impide salir de vacaciones, mientras que 1,5 millones de europeos viven asustados ante la posibilidad de morir a consecuencia de un ataque asmático, según un estudio realizado por la Federación Europea de Asociaciones de Pacientes con Alergia y Enfermedades Respiratorias de la que informó hoy Novartis en un comunicado.
En este sentido, los resultados de esta encuesta realizada entre 1.300 pacientes señalaron que el 38% de los encuestados añade que la enfermedad no les deja salir con sus amigos como desearían, y casi la mitad da importancia al hecho de no poder tener mascotas y no poder visitar a amigos que las tengan.
Al mismo tiempo, el 70% no puede realizar ejercicio físico, mientras que el 22% de los pacientes españoles con asma grave que participaron en este estudio reivindicaron "en mayor medida que en otros países" que se invirtiera en investigación para nuevos tratamientos.
Según el doctor Joaquín Sastre, del Servicio de Alergología de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, las crisis que ponen en peligro la vida del enfermo se pueden prevenir, al tiempo que el asma grave no controlado puede tener "un gran impacto en la calidad de vida de los pacientes" debido a la excesiva medicación a la que están expuestos y a la limitación de sus actividades personales, laborables y de ocio.
Asimismo, las exacerbaciones graves se pueden suceder en cualquier momento y son causa de reacciones alérgicas ante productos irritantes como puede ser la contaminación o el tabaco. Durante el inicio de una crisis asmática es necesario "un tratamiento adecuado para mejorar las exacerbaciones ya que puede empeorar progresivamente", explicó el doctor Sastre.