LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un hombre de 74 años de edad ha muerto hoy en Gran Canaria debido a un golpe de calor provocado por las elevadas temperaturas de estos días, según informó el Gobierno de Canarias en nota de prensa.
El anciano también padecía patologías crónicas. Las altas temperaturas en Canarias han provocado que otras dos personas, un hombre de 97 años de edad y una mujer de 73, estén ingresados en centros sanitarios de Gran Canaria aunque evolucionan favorablemente.
Además, en la isla de Tenerife continúa estable el joven ingresado en un centro sanitario con diagnóstico de golpe de calor que sufrió tras permanecer una jornada trabajando al aire libre en horas de máxima insolación.
Por todo ello, y ante la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología de que las elevadas temperaturas en Canarias se mantengan hasta este fin de semana, la Consejería de Sanidad solicitó a los ciudadanos la necesidad de extremar las medidas de precaución para evitar que el calor cause daños a su salud, así como tener especial cuidado con niños, mayores y enfermos, que son los colectivos "más vulnerables" a las altas temperaturas.
RECOMENDACIONES
Las recomendaciones frente al incremento de temperaturas pasan por no hacer ejercicio físico al aire libre, con lo que no sólo se evita una exposición al sol y al calor, sino también a la calima, que suele resecar las vías respiratorias y agravar afecciones relacionadas con ellas.
Asimismo, se recomienda beber más agua, independientemente del tipo de actividad que se esté llevando a cabo para mantenerse bien hidratado y reducir también las posibilidades de sufrir un golpe de calor; evitar las comidas copiosas y el consumo de bebidas alcohólicas, café, té o refrescos azucarados, ya que facilitan la pérdida de líquidos y la consiguiente deshidratación del organismo; así como no exponerse al sol entre las 12.00 y las 16.00 horas, periodo del día en que los rayos solares llegan más verticalmente y la radiación es más intensa.
Otros de los consejos serían permanecer en lugares frescos, especialmente en el caso de personas mayores, niños y enfermos crónicos; elegir ropa de colores claros y fibras naturales, en el caso de tener que salir, y se aconseja el uso de ropas holgadas que permitan la transpiración, así como protegerse la cabeza del sol con sombreros, gorras o similares.
Si a pesar de estas medidas preventivas se dieran síntomas de trastorno por calor, la Consejería de Sanidad recomienda refrescarse con una esponja o toallas húmedas, tomar una ducha o baño (si no se tienen mareos), beber líquidos frescos no alcohólicos ni azucarados y, si los síntomas no remiten, se deberá solicitar ayuda médica lo antes posible.
El Departamento autonómico activó desde el pasado 1 de junio el Plan de Actuaciones Preventivas de los efectos del exceso de temperaturas sobre la salud, un operativo que se mantendrá hasta el 30 de septiembre.